A la familia Albrecht, compuesta hoy por los herederos de los fundadores de la cadena de supermercados Aldi, los hermanos Karl y Theo Albrecht, se la considera una de las familias más ricas de Alemania. No es para menos. Los Aldi representan un negocio multimillonario. El patrimonio de la familia está valorado en 19.200 millones de euros. Pero donde hay mucho dinero, también puede haber problemas. En este caso, son importantes problemas familiares.
En 1961, Karl y Theo Albrecht, los fundadores de Aldi, separaron su negocio, partiéndolo en Aldi Nord y Aldi Süd. Se supone que lo hicieron para evitar enfrentamientos entre hermanos. Así, un Aldi tendría su negocio en una parte del mundo, norte de Alemania y el noroeste europeo en el caso de Aldi Nord, mientras Aldi Süd se dedicaría al sur Alemán, Centroeuropa, y más allá del viejo continente.
Pero estos líos familiares que Karl y Theo querían evitar, sesenta años después, parece que eran inevitables. De lo contrario, los Albrecht no habrían sido noticia de un tiempo a esta parte por las tensiones de sus miembros, enfrentados a cuenta del control de las diferentes fundaciones que sirven para llevar las riendas de Aldi Nord.
Esas fundaciones llevan por nombre Fundación Markus, Fundación Lukas y Fundación Jakobus. Las grandes decisiones de Aldi Nord se toman cuando las tres fundaciones se ponen de acuerdo. Así se evitaba, en principio, que la familia ejerciera demasiada influencia sobre el devenir de un imperio que es referente en su sector, junto a otro de los grandes nombres de la distribución a precios reducidos de Alemania como Lidl.
Ahora bien, las relaciones entre unos y otros en los Albrecht ha terminado teniendo un impacto en Aldi Nord. De hecho, la lucha de poder en la Fundación Jakobus, entre Babette Albrecht, nuera de Theo Albrecht, y Theo júnior Albrecht, hijo de uno de los fundadores y responsable en las otras fundaciones, ha sido objeto de muchas noticias.
Tensiones familiares: unos ahorradores y otros despilfarradores
Sobre todo, a sabiendas de que Babette y sus cinco hijos tienen fama de ser más bien despilfarradores con el dinero que genera Aldi Nord. Babette es una habitual de la prensa rosa teutona. Parece ser todo lo contrario de Theo júnior Albrecht, cuya descripción aquí encaja con la del típico alemán “austero”, pero millonario. Este Albrecht aparece tan poco en la prensa que sólo el mero hecho de que conceda una entrevista ya es noticia.
Theo júnior no está solo en las críticas hacia Babette y los suyos. Hace poco más de dos años, cuando falleció la matriarca de los Albrecht, Cäcile, la que fuera esposa de Theo Albrecht, definió de esta forma en su testamento a Babette y su prole: “han decidido usar la Fundación Jakobus para sus intereses, no están capacitados para asumir responsabilidades en la gestión”.
En el contexto de esas peleas se han visto noticias sobre Aldi Nord que dan cuenta de una marcha algo accidentada. Al menos en Dinamarca, donde a finales del año pasado, esta compañía vendía y cerraba sus 188 tiendas en el país nórdico.
Esta decisión, de acuerdo con el diario Handelsblatt, estaba destinada a “establecer nuevas prioridades en su negocio exterior”, pero también para “liberar capital para inversiones en mercados en crecimiento”. Se supone que todos los recursos obtenidos de la salida de Dinamarca, donde empezaron a abrirse supermercados de Aldi Nord hace casi medio siglo, se emplearán en realizar nuevas inversiones.
Precisamente para poder emprender iniciativas nuevas como esas que permiten la salida danesa parece que se ha firmado “una paz familiar” después de diez años de tensiones familiares. Así presentaba al menos la prensa alemana lo comunicado desde Aldi Nord esta semana, dando cuenta de que se “resolverán los largas diferencias” que han marcado los últimos años de la empresa. Lo harán, por lo visto, a través de una considerable reestructuración.
¿Un primer paso hacia la unión de Aldi Nord y Aldi Süd?
Así, los propietarios de la empresa van a pasar a estar representados en un consejo de supervisión, según ha recogido en sus páginas económicas el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung. También se adoptará una nueva forma de grupo empresarial, llamado Fundación Aldi Nord & Co., que estará dirigido por un CEO nombrado por los accionistas.
Para ese cargo de presidente del Consejo de Administración suena el nombre de Torsten Hufnagel, uno de los actuales dirigentes y considerado jefe de facto de la empresa. Tal vez con esta nueva estructura logre Hufnagel ser más protagonista que los gastos Babette Albrecht e hijos.
La reestructuración está aún pendiente de ser validada por las autoridades alemanas, pero se ha visto incluso como un “posible” primer paso para la fusión de los dos 'Aldis', el Aldi Nord y Aldi Süd.
De lograrse una fusión así, las dos ramas de Aldi que formaron en su momento los hermanos Karl y Theo Albrecht daría lugar a una nueva firma, obviamente, mucho más potente. Se estima en algo más de 90.000 millones de euros el volumen de negocio que ambas compañías sumarían, aportando más en esa suma Aldi Süd (60.200 millones de euros) que Aldi Nord (32,200 millones de euros).
Desde mayo de 2020, la dirección de Aldi Süd, con Thomas Ziegler al frente, trabajan para aumentar la cooperación con Aldi Nord. Su objetivo siempre ha sido cazar al líder de los supermercados con precios rebajados: Lidl.