La demanda acumulada de electricidad en el sistema peninsular ha caído en torno a un 18% durante este lunes, primer día laborable tras la paralización de toda la actividad económica no esencial decretada por el Consejo de Ministros para tratar de frenar el avance del coronavirus.
Según datos facilitados por el Ministerio para la Transición Ecológica, la demanda acumulada de energía eléctrica a nivel peninsular hasta las 20.00 horas de este lunes ha sido aproximadamente un 18% inferior con respecto a los lunes equivalentes sin el estado de alarma en vigor y está un 7% por debajo con respecto al lunes de la semana pasada.
Con respecto a hace un año, la caída de la demanda de electricidad registrada este lunes es de aproximadamente 99 GWh si se compara con la registrada el 1 de abril de 2019, lo que supone un descenso del 17%; con respecto al último lunes sin estado de alarma, el pasado 9 de marzo, el retroceso es del 18%, equivalente a unos 105 GWh. Y si se compara la demanda de este lunes con la de hace una semana, la caída es de unos 37 GWh, que supone un retroceso del 7%.
Este lunes a las 9 de la mañana, el consumo eléctrico en el sistema peninsular se situaba en 23.258 megavatios (MW), lo que supone un descenso del 13% frente a los 26.732 MW de la misma hora hace una semana y del 30% con respecto a los 32.869 MW del 9 de marzo, día en que se anunció el cierre de las escuelas en la Comunidad de Madrid y todavía no estaba decretado el estado de alarma.
No obstante, este dato de demanda instantánea, recogido de la web del operador del sistema en un día inusualmente frío para esta época del año, no depura el efecto de las temperaturas y el calendario laboral.
Fuentes del sector creen que la verdadera dimensión de la caída de la demanda eléctrica tras el endurecimiento de las medidas de parálisis económica se va a percibir con más claridad a partir de este martes, a medida que vayan entrando en modo de parada segura las grandes industrias electrointensivas que no pueden paralizar su actividad de un día para otro. Esto va inducir un bajón todavía mayor del consumo, dado que la industria supone en torno a la mitad de la demanda eléctrica en España.
Según datos recopilados por EFE, el parón de la economía por el estado de alarma decretado para combatir al Covid-19 ya ha ocasionado un derrumbe de hasta el 90% en el consumo eléctrico de ciertas industrias, una circunstancia que previsiblemente se generalizará aún más tras la decisión de cerrar entre este lunes y el martes todas las actividades no esenciales.
Así, sectores como el de proveedores para fábricas de vehículos, el metal, la industria del mueble o la juguetera han llegado a ver reducido a una décima parte de lo normal su consumo de luz a raíz del estado de alarma decretado el pasado 14 de marzo.
La emergencia sanitaria del coronavirus también ha obligado a retrasar las recargas de combustible de dos centrales nucleares, Almaraz (Cáceres) y Ascó (Tarragona), que inicialmente tenían previsto realizarlas el 29 de marzo y el 28 de abril, respectivamente. La próxima en el calendario es la de Trillo (Guadalajara), que tiene prevista su recarga para el próximo mes de mayo.
No obstante, la cobertura de la demanda está garantizada y no se descarta que el operador del sistema tenga que ordenar la parada de instalaciones de producción de energía eléctrica ante el bajón del consumo.