Un 26,5% de los españoles considera que pagar una reparación doméstica sin factura para evitar abonar el IVA no es un comportamiento “poco” o “nada tolerable”, según el último 'Barómetro Fiscal' del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). El 1,8% cree que es una práctica “muy” tolerable, un 11,3% señala que es “bastante tolerable” y un 13,4% contesta (sin que le planteen esa respuesta) que “depende”.
Es la primera vez que el CIS incluye en este estudio anual preguntas sobre la tolerancia ante el fraude fiscal en comportamientos muy específicos como “que una gran empresa eluda o evite pagar el impuesto de sociedades”. Este es el más rechazado: el 74,6% lo considera “nada tolerable”.
El estudio, que se basa en 2.469 entrevistas realizadas entre el 9 y el 27 de julio, tras la campaña anual de la Declaración de la Renta, refleja que sigue por encima del 90% el porcentaje de encuestados que creen que en España hay “mucho” o “bastante” fraude fiscal (59,7% y 34,9%, respectivamente). En 2017 se alcanzó un máximo del 95,1% desde que en 1994 el CIS empezó a preguntar por esta cuestión.
Sí alcanza un máximo el porcentaje (47,4%) de los que creen que los españoles son “poco conscientes y responsables” al pagar impuestos. El CIS empezó a preguntar por esta cuestión en 2008 y desde entonces esa respuesta no ha dejado de crecer. Este año, solo un 4,1% opina que los españoles son “muy conscientes y responsables” en esta materia. Un 32,8% cree que son “bastante conscientes y responsables”. Por primera vez, no se incluye la posibilidad de responder que son “muy poco conscientes” y se ha sustituido por “nada conscientes y responsables”, opción por la que se decanta un 9,5%.
La “falta de honradez y conciencia ciudadana” es por primera vez la principal razón que mueve a las personas a ocultar parte o todos sus ingresos a Hacienda. Lo cree así el 22,4% de los encuestados, por delante de otras razones como que “los salarios son demasiado bajos y hay que buscar otras opciones para conseguir dinero” (15,5%), la escasez de empleos (13%) y “la falta de control de la Administración” (12,2%), que en 2016 se citaba como principal razón con el 21,7%.
La encuesta refleja que el 57,4% de los españoles cree que los españoles pagamos mucho en impuestos y un 87,6% no se cree que se cobren con justicia, pero aun así hay más gente dispuesta a pagar más con el fin de mejorar los servicios públicos, un 45,1%, frente al 19,6%, que optaría por pagar menos impuestos aunque hubiera que reducir los servicios públicos.
Solo un 8,5% de los españoles cree que los impuestos en España “se cobran con justicia”, mientras el 87,6% no lo cree así, el porcentaje más alto desde 2014. Sube hasta el 63% el porcentaje de los que creen que la Administración hace “pocos” (44,4%) o “muy pocos” (18,6%) esfuerzos para luchar contra el fraude fiscal. En 2012, año de la amnistía fiscal declarada inconstitucional el año pasado, la suma de ambos porcentajes alcanzó un máximo del 73,3%.
Sigue siendo mayoritaria la idea de que los impuestos son necesarios para que el Estado pueda prestar servicios públicos (55,6%), pero el 27,4% cree que son algo que se obliga a pagar sin saber muy bien a cambio de qué. Sólo el 12,7% opina que son un medio para redistribuir mejor la riqueza en la sociedad. Más de la mitad (55,4%) cree que la sociedad se beneficia poco de lo que paga a las administraciones el conjunto de la sociedad en impuestos y cotizaciones, y el 59,5% considera que la administración le da menos de lo que paga.
Respecto a las partidas más sobrefinanciadas, encabeza la lista Defensa (el 34,5% cree que se destinan demasiados recursos), mientras que entre las infrafinanciadas están la Seguridad Social y el gasto en pensiones (el 69,8% piensa que se destinan muy pocos), Dependencia (68%), investigación y ciencia (65%) y Sanidad (64,6%).
Por último, el porcentaje de los encuestados que dicen marcar la casilla de la Iglesia Católica en su declaración del IRPF es el más bajo de la serie histórica (que abarca hasta 2008): 13,5%.