El Fondo Monetario Internacional (FMI) admitió “notables fallos” en el diseño del primer plan multimillonario de rescate a Grecia y aseguró que subestimó los efectos negativos de las políticas de austeridad en el país.
“Hubo notables fallos. La confianza de los mercados no se logró restaurar, el sistema bancario perdió el 30 % de los depósitos y la economía se enfrentó a una recesión mucho más profunda de lo previsto, con un desempleo excepcionalmente alto”, indicó el FMI en un documento de revisión del programa de rescate financiero a Grecia de 2010.
En los primeros cálculos del Fondo, la economía griega se contraería un 5,5 %, mientras que finalmente lo hizo en un 17 % entre 2009 y 2012, y el desempleo previsto fue de un 15 %, aunque finalmente alcanzó el 25 % en 2012.
Grecia recibió el primer paquete de rescate financiero internacional por parte de la conocida como “troika”, formada por la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el propio FMI, por un monto total de 110.00 millones de euros.
“La deuda pública superó las proyecciones del programa por largo margen”, agregó el reporte.
Asimismo, Poul Thomsen, jefe de la misión del Fondo para Grecia, hizo autocrítica durante una conferencia telefónica sobre los “retrasos” a la hora de gestionar la reestructuración de la deuda en 2012 y señaló que si se ésta se hubiera hecho con antelación “se habría reducido la carga del ajuste y sus efectos dramáticos sobre la economía”.
El organismo internacional reconoce ahora que “las incertidumbres sobre el rescate eran tan significativas que sus técnicos fueron incapaces de garantizar que la deuda pública era sostenible con un alto nivel de probabilidad”.
Esta cuestión, la sostenibilidad de la deuda pública a medio plazo, es uno de los criterios exigidos por el FMI para respaldar un programa de rescate.
No obstante, asegura que la recesión era “inevitable” dadas las condiciones del país, aunque matiza que las políticas de reforma fiscal deberían haber sido aplicadas con “más parsimonia”.
Subrayó, además, la necesidad de “agilizar” el funcionamiento de la “troika”, dado el “solapamiento de las responsabilidades de las instituciones que la constituyen”.
El Fondo recordó que el rescate a Grecia es el mayor de su historia, y que ha comprometido cerca de 30.000 millones de euros.