El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes las nuevas condiciones de los ERTE (expedientes de regulación temporal de empleo) y de las ayudas para los autónomos desde el mes de julio y hasta el 30 de septiembre. La ministra portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha destacado que las medidas nacen del consenso social con empresarios, sindicatos y organizaciones de autónomos y ha pedido que la capacidad de pactos y acuerdos del diálogo social llegue a la política. “Los españoles necesitan más política útil, menos ruido, menos crispación”, ha sostenido Montero.
La portavoz del Gobierno ha resumido ambos acuerdos laborales en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que ayer por la tarde presentaron la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y el de Seguridad Social, José Luis Escrivá. María Jesús Montero ha subrayado estas nuevas medidas de protección de empresas, autónomos y asalariados, que ha recordado que suponen una diferencia en la mayor protección social de la población respecto a lo que ocurrió en la pasada crisis económica.
María Jesús Montero ha transmitido la intención del Gobierno de coalición de seguir tomando medidas de la mano de los sindicatos y la patronal. Sobre ello, ha insistido que el anteproyecto de ley sobre teletrabajo, que reconoce el derecho a trabajar a distancia en caso enfermedad y accidente de familiares, es por el momento solo el borrador de Trabajo y que será consultado con los sindicatos y la patronal, que podrán discutir su contenido.
Gracias a este nuevo acuerdo con los agentes sociales, que ha requerido mucha negociación y que el Ejecutivo mejorase en varias ocasiones sus propuestas, el Gobierno se vuelve a apuntar otro punto en su discurso sobre la necesidad de una reconstrucción económica consensuada. A nivel político, hasta el momento los pactos están siendo muy complicados. “Las soluciones que necesita el país deben tener el mayor consenso, el mayor respaldo posible” ha apuntado Montero.
ERTE por tres meses más
Los ERTE se mantendrán, que ahora caducaban el próximo martes 30 de junio, hasta el 30 de septiembre, aunque con diferentes condiciones (aquí en profundidad) respecto a las que han estado vigentes durante el estado de alarma.
Tras mucha negociación, los empresarios decidieron ayer respaldar la última oferta del Ministerio de Trabajo para extender estos expedientes, que permiten tener a toda la plantilla en ERTE si sigue siendo inviable reabrir las empresas y se habilitan las condiciones para acordar nuevos ERTE por fuerza mayor en caso de rebrotes.
Las exoneraciones de cuotas a la Seguridad Social de las empresas en ERTE se adaptan a la nueva normalidad. Por ejemplo, los ERTE por causas objetivas (ETOP) también tendrán derecho al ahorro en las cuotas que pagan las empresas a la Seguridad Social y los ERTE que hasta el momento eran de fuerza mayor total (sobre toda la plantilla) ahora podrán mantenerse sobre la totalidad de los empleados pero se denominarán ERTE “de transición” y sus exenciones en las cuotas serán inferiores.
El decreto de ampliación de los ERTE desarrolla también medidas laborales asociadas y que actúan como contrapartida al apoyo con fondos públicas a las empresas, explicó ayer la ministra Díaz. Por ejemplo, se amplía a los ERTE por causas objetivas la condición de mantener el empleo seis meses después del expediente, ya que ahora tienen derecho a las ayudas en el pago de cotizaciones sociales. También se extiende hasta el 30 de septiembre la imposibilidad de despedir por causas objetivas.
Nuevas ayudas a los autónomos
Por otro lado, el Ministerio de la Seguridad Social consensuó ayer con los colectivos de autónomos las ayudas para los trabajadores por cuenta propia en la nueva normalidad, que también serán menores que durante el estado de alarma dado que se han ido levantando las restricciones a la actividad.
Las medidas son básicamente tres:
En primer lugar, los trabajadores que estaban cobrando hasta el momento la prestación extraordinaria por cese de actividad, la especie de 'paro' que se creó el Gobierno para la crisis por la COVID-19, tendrán derecho a exenciones en el pago de las cuotas a la Seguridad Social hasta el 30 de septiembre.
Será un ahorro total, del 100% de exoneración en la cuota, en el mes de julio y para los meses de agosto y septiembre la exención alcanzará el 50% y el 25%, respectivamente.
En segundo lugar, la ayuda extraordinaria por cese de actividad finaliza como tal este mes, pero el Gobierno ha facilitado el traspaso de los autónomos que peor lo están pasando al cobro de otra ayuda: la prestación ordinaria de cese de actividad. En la actualidad, más de 1,4 millones de autónomos tienen ahora concedida la prestación extraordinaria, de un mínimo de 661 euros (el equivalente al 70% de la base reguladora).
Los beneficiarios de la prestación extraordinaria tendrán más facilidades para solicitar la prestación ordinaria por cese de actividad. Se podrá solicitar “siempre que acrediten una reducción de la facturación del 75% del tercer trimestre de 2020 respecto al mismo periodo de un año antes, entre otros requisitos”, apunta la Seguridad Social. Fuentes de la negociación apuntan que uno de estos requisitos será que los rendimientos netos de la actividad que no superen 1,75 veces el salario mínimo interprofesional (1.939,58 euros al mes).
Las personas que perciban esta ayuda ordinaria tendrán derecho a la recuperación de las cuotas abonadas en materia de contingencias comunes.
En tercer y último lugar, se crea una prestación extraordinaria para el colectivo de trabajadores autónomos de temporada, que son aquellos con una actividad estacional y que quedaron excluidos del 'paro' por cese de actividad por la COVID-19 porque no estaban dados de alta en la Seguridad Social en el estallido de la pandemia.
Se trata de muchos autónomos vinculados al turismo y a otras actividades que tienen lugar cuando llega el tiempo estival, como las ferias y las verbenas. A falta de la letra pequeña sobre este nuevo subsidio, fuentes de la negociación apuntan a eldiario.es que se exigirá un mínimo de dos años de cotización para el acceso a la ayuda.