Hoy hay más población en riesgo de pobreza que cuando Rajoy llegó al poder
Hoy hay más población en riesgo de pobreza que en 2011. Este dato demoledor lo aporta la Encuesta de Condiciones de Vida publicada este martes por el Instituto Nacional de Estadística: en 2016, el 27,9% de la población estaba en riesgo de exclusión social frente al 26,7% de 2011, cuando Mariano Rajoy llegó a la presidencia del Gobierno. El dato contrasta con la evolución de la economía: mientras que hace seis años, el PIB cayó un 1%, en 2016 la economía creció un 3,6%. O, dicho de otra forma, el crecimiento de la economía no se ha traducido en una mejora de la exclusión social.
El indicador que mide la exclusión social es la tasa AROPE, que tiene en cuenta tres factores: la tasa de pobreza económica (es pobre quien está por debajo de la mediana de ingresos), la baja intensidad en el empleo y la carencia material severa. La combinación de esos tres factores es la que arroja el 27,9% de población en riesgo de exclusión social.
La pobreza económica mide el nivel de ingresos, la baja intensidad en el empleo se fija en las horas trabajadas y la precariedad, y la carencia material tiene en cuenta factores como poder permitirse una comida de carne o pescado al menos cada dos días o tener capacidad para afrontar gastos imprevistos. Basta con cumplir uno de estos tres factores para estar incluido en la tasa AROPE.
La evolución de este indicador choca con la trayectoria del PIB en el mismo periodo. En 2012, la economía decreció un 2,9%, y la tasa AROPE se situó en el 27,2%, 0,5 puntos más que el año anterior. En 2013, el PIB bajó un 1,7% y el riesgo de pobreza estaba en el 27,3%, solo una décima más. En 2014, cuando la economía volvió a crecer (un 1,4%), el riesgo de exclusión social creció casi dos puntos. En 2015 y 2016, con un PIB subiendo al 3,2%, la tasa AROPE ha bajado ocho y siete décimas, respectivamente.
En total, desde 2008, año en que se desencadenó la recesión, la tasa AROPE ha crecido 4,1 puntos porcentuales: ha pasado del 23,8% al 27,9%.
Formación y empleo influyen
Los perfiles que traza la Encuesta de Condiciones de Vida sirven para comprobar hasta qué punto influyen ciertos factores en el riesgo de pobreza. Las personas paradas tienen más riesgo de exclusión social, así como las menos formadas. Pero también el tipo de hogar y tus circunstancias familiares son determinantes: mientras que el riesgo de pobreza (económica, la que mide la mediana de ingresos) general es del 22,3%, en el caso de los hogares monoparentales (mayoritariamente formados por mujeres), sube al 42,2%.
El riesgo de exclusión social es también mucho más elevado entre la población extranjera, del 52,1% para los no comunitarios y del 40,3% para los extranjeros europeos frente al 18,8% de los nacionales.
Menos ingresos
Los ingresos medios de los hogares tampoco se recuperan al ritmo que lo hace la economía. En 2016, esos ingresos medios fueron de 26.730 euros al año, un 2,4% más que el año anterior. Si lo comparamos con un periodo de tiempo más grande observamos que esos ingresos han menguado. En 2011 eran de 28.206 euros anuales y en 2008, de 28.787 euros. Es decir, los hogares ingresan ahora menos que a comienzo y a mitad de la crisis económica.
La evolución exacta depende del tipo de hogar que tomemos como referencia, aunque prácticamente todos han perdido ingresos o, como mucho, se mantienen estables en niveles muy similares a los que tenían en 2011 o 2008.