El Ibex 35 ha cerrado 2019 con una revalorización anual del 11,8%, la mayor desde 2013, pero inferior a la de la mayoría de grandes bolsas mundiales. En la última sesión del año, más corta de lo habitual (cerró a las 14.00 horas), el selectivo acabó el martes el ejercicio con una caída del 0,66%, hasta los 9.549 puntos, y con el citado avance del 11,8%, el mayor desde el 21,5% registrado en 2013, el año posterior al rescate de Bankia.
Con el avance registrado en 2018, el selectivo ha recuperado buena parte de lo perdido en 2018, cuando perdió un 15%, en su peor ejercicio desde 2010.
2019 ha sido un año marcado por la incertidumbre derivada del Brexit y de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, que ahora parecen finalmente en vías de solución; en Europa, el año estuvo marcado por el temor a una recesión en la locomotora alemana que finalmente no ha llegado y, en España, por la incertidumbre derivada de la ausencia de Gobierno y la crisis catalana.
Sin embargo, más que en el contexto político, la explicación para el peor comportamiento del Ibex con respecto a otros mercados está en el elevado peso de la banca en el selectivo español y en los problemas de este sector en bolsa, como consecuencia de la política de tipos de interés ultrabajos del Banco Central Europeo (BCE).
Eso ha propiciado que el selectivo español haya acabado el año con una subida inferior a las del resto de grandes parqués europeos, inferior incluso a la de la Bolsa de Londres, que se ha revalorizado un 12,77%, y muy por debajo de los avances anuales registrados por el índice europeo Eurostoxx, el Dax alemán, el CAC francés o Wall Street, todos ellos por encima del 20%.
En el año, los mejores resultados en el Ibex son para Cellnex, con un alza del 94,68%, seguido de Ferrovial, con un 57,18%, Siemens Gamesa, con un 47,2%, e Inditex, que ha subido un 45,3%. El grupo textil llegó a recuperar la semana pasada los 100.000 millones de capitalización que había perdido en 2017 y durante este año se ha consolidado como el mayor valor del Ibex, en detrimento de Banco Santander.
Los bancos, como señala Ignacio Gutiérrez, presidente de MG Valores, tienen un “problema estructural” de falta rentabilidad y se están mostrando como los grandes perdedores del proceso de cambio tecnológico. El pasado verano, los seis bancos del Ibex estuvieron a punto de ser superado en valor bursátil por las tres grandes eléctricas (Iberdrola, Endesa y Naturgy), que (sobre todo en el caso de las dos primeras) han cerrado el año con fuertes incrementos en su capitalización (38,8% en el caso de Iberdrola y 25,3% en el de Endesa).
De hecho, si se cuenta al sector energético del Ibex en su conjunto y se suma también a Repsol, Red Eléctrica y Enagás, la banca ya capitaliza a un valor inferior al de los valores relacionados con la energía.
Bankia es no en vano el segundo peor valor del Ibex en 2019, con una caída acumulada del 21,92%, solo superada por Ence (-41,54%), muy penalizada este año por el incierto futuro de su fábrica de Pontevedra. Los otros farolillos rojos del año son Arcelormittal (-13,23%) y Telefónica (-10,17%). En el Mercado Continuo (valores medianos), el mejor comportamiento es para la biotecnológica Pharma Mar, con una subida del 227% en el ejercicio.
Sequía de salidas a Bolsa
2019 ha sido, un año más, un año muy parco en salidas a Bolsa en España. Si se excluyen las que se han llevado a cabo en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB), con requisitos más laxos que en los mercados principales (destaca el estreno de la comercializadora Holaluz), solo se ha producido una salida al Mercado Continuo, la de otra empresa relacionada con las energías renovables, Greenergy, que además ya cotizaba en el parqué a través del MAB.
Esta falta de interés por salir a cotizar es “un fenómeno preocupante”, según el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Sebastián Albella, que el lunes reclamó en un artículo en El País “aligerar” ciertos requisitos para atajar la sequía de debuts en el parqué.
Juan Ignacio Crespo, asesor del fondo Multiciclos Global Renta 4, que recuerda que la falta de salidas al parqué es un fenómeno “mundial” (lo atribuye a “la falta de start-ups exitosas que merezca la pena sacar a bolsa”), pronostica que “lo normal” es que en 2020 la renta variable continúe al alza, “aunque habrá sustos por el camino porque si no, esto no sería la bolsa”. Al menos, durante el primer semestre, periodo en el que estará garantizado que los bancos centrales de Europa y Estados Unidos sigan inyectando liquidez.
Por su parte, el presidente de MG Valores coincide en su pronóstico de que 2020 va a ser un año “relativamente bueno” para la Bolsa. “Lo que se temía de una recesión, parón o desaceleración fuerte hoy por hoy en Europa se está sobrellevando bastante bien”, dice Gutiérrez, que sin embargo dice no ser “muy optimista” respecto al impacto que pueden tener las medidas que aplique el próximo gobierno, si bien las empresas del Ibex tienen la “ventaja” de que más del 60% de su cuenta de resultados viene del exterior.