Las mujeres suponen el 10% de la alta dirección de las empresas del Ibex
En España, las pymes tienen el doble de hombres directivos que de mujeres y, en el índice que aglutina a la élite empresarial, el Ibex 35, la presencia femenina en los consejos de administración no llega al 17% de los vocales, más de tres puntos por debajo de la media europea.
En un país que se salta sus propias leyes en esta materia, al incumplir desde este año el artículo 75 de la Ley de Igualdad del año 2007, que propugnaba la “presencia equilibrada de mujeres y hombres” en los órganos de gestión de las grandes empresas para este ejercicio, las cosas no están mucho mejor en la segunda línea de gestión del Ibex, la denominada alta dirección.
En este ámbito, no existen recomendaciones de género como las que recoge para las consejeras (a título no vinculante) el nuevo código de buen gobierno de las sociedades cotizadas.Y el panorama en materia de igualdad es, de hecho, más desolador si cabe.
En 2014, apenas 46 de los 447 puestos de alta dirección en las empresas del principal índice bursátil español estaban ocupados por mujeres, lo que supone un 10,29% del total.
Así, en el año en el que el porcentaje de empresas Ibex que tienen a una mujer como máxima responsable se duplicó, al pasar del 2,9% al 5,8% gracias en parte al ascenso de Ana Patricia Botín en el Santander en sustitución de su padre el fallecido Emilio Botín- el porcentaje de mujeres en la alta dirección retrocedió ligeramente respecto a 2013, cuando era del 10,35%, con 44 mujeres sobre un total de 425 puestos.
Ocho sin ninguna mujer
De acuerdo con los datos disponibles en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), al cierre del último ejercicio ocho empresas no tenían ninguna mujer en su alta dirección. Se trata de Abertis, Caixabank, Gamesa, Gas Natural, Iberdrola, Mapfre, Red Eléctrica y Telefónica.
Sin embargo, Red Eléctrica e Iberdrola tienen una alta presencia femenina en el Consejo de Administración (el órgano más vistoso de una empresa). El 45,4% y 35,7% de los miembros de sus consejo son mujeres aunque luego no tengan directivas.
Y al cierre del año pasado tampoco tenía ninguna alta directiva una de las tres compañías que en aquel momento carecía también de mujeres en su máximo órgano de gestión: Gas Natural, que acaba de poner remedio a esta última circunstancia con el fichaje como consejeras de la exministra socialista Cristina Garmendia y de la excomisaria europea Benita Ferrero-Waldner, nombradas el pasado jueves.
En el otro extremo está Bankinter, cuya primera ejecutiva es, de hecho, una mujer (María Dolores Dancausa), y que cuenta con tres mujeres en su alta dirección, que suponen el 42% del total de esos puestos, el porcentaje más alto del Ibex. A continuación están Banco Sabadell (33%), Amadeus y Repsol (25%), Dia (22%), Grifols (21%), Bankia (20%), Inditex (19%) y Acciona (16%).
En 2014, el peso de las mujeres aumentó en la alta dirección de siete empresas del Ibex (Acciona, ACS, Banco Popular, Bankinter, BBVA, Enagás y Mediaset) y se redujo en otras seis (Abengoa, Abertis, Bankia, Grifols, IAG y Sacyr). En el resto, se mantuvo sin cambios.
Los datos demuestran que el denominado techo de cristal está muy lejos de romperse en España. Como señala el periodista Juan Pedro Velázquez-Gaztelu en su reciente libro Capitalismo a la española (La esfera de los libros, 2015), “la ausencia femenina en lo más alto del mundo empresarial contrasta con la rapidísima incorporación de la mujer al mercado laboral en las últimas décadas, sin duda uno de los grandes éxitos de la democracia”.
El periodista de la revista Alternativas Económicas, medio asociado con eldiario.es, parafrasea en su libro a la exvicepresidenta de la Comisión Europea y excomisaria Viviane Reding (“Si Lehman Brothers hubiera sido Lehman Sisters, quizás todo habría sido mucho mejor”), ardiente defensora del aumento número de mujeres en la cúpula de las empresas.
Así, Velázquez-Gaztelu recuerda que, según un estudio de la consultora McKinsey, los beneficios de las empresas con un equipo directivo paritario son un 56% superiores y que, de acuerdo con un análisis realizado por Credit Suisse sobre 2.360 multinacionales, “las que tienen mujeres en puestos directivos superan en rentabilidad a sus competidoras con cúpulas exclusivamente masculinas, además de haber reducido su deuda con más facilidad”.