Actuar antes de que sea demasiado tarde. En este caso, antes de que se produzca una muerte laboral. La vicepresidenta Yolanda Díaz ha presentado este jueves el nuevo Plan de Choque contra la siniestralidad mortal en el trabajo, que su Ministerio pondrá en marcha en enero y se desplegará a la largo del próximo año. La principal novedad, ha explicado Díaz, parte de la utilización del cruce masivo de datos y de la información de un reciente informe sobre siniestralidad para centrar la actuación de la Inspección de Trabajo en sectores y empresas más peligrosas. Es decir, aquellas que presentan una mayor probabilidad de siniestros según los datos.
En España mueren casi dos trabajadores al día. En lo que va de 2021, hasta septiembre, han fallecido 527 personas en accidentes laborales. Después de años de descenso de estas muertes, desde 2013 los fallecimientos aumentaron y los descensos registrados del total de accidentes han sido más leves que en el pasado, por lo que el Ministerio de Trabajo espera que esta nueva hoja de ruta suponga un “punto de inflexión” a la baja.
Las intervenciones del Plan se dirigirán fundamentalmente a “actividades prioritarias,” que son aquellas que presentan mayores índices de incidencia de accidente de trabajo mortal y que además cuentan con un mayor número de personas expuestas, según la información de los años 2017 a 2019 de una investigación del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST).
Estas actividades más peligrosas se encuadran en cuatro bloques principales: sector primario (pesca y agricultura), la construcción (sobre todo de edificios), la industria (principalmente la recogida de residuos) y el transporte por carretera.
La directora de la Inspección de Trabajo, Carmen Collado, ha apuntado que la autoridad laboral seguirá manteniendo la vigilancia general de todos los sectores mediante las actuaciones ordinarias de oficio, pero además se pondrá en marcha este plan de acción específico.
Actuar donde ya hay más accidentes
Ese riesgo concreto de las empresas se medirá gracias al cruce masivo de datos mediante la Herramienta de lucha contra el fraude, ha explicado Yolada Díaz. La inteligencia artificial, que ya colabora en la detección de temporalidad abusiva entre otras infracciones, se pondrá al servicio de la prevención de accidentes. “Ha llegado el momento de utilizar esta herramienta para garantizar la salud laboral”, ha destacado la vicepresidenta segunda.
Carmen Collado ha explicado que las empresas de los sectores señalados que finalmente serán objeto de actuaciones de la Inspección de Trabajo será aquellas que tengan “más probabilidad” de registrar accidentes mortales a partir de los datos de los últimos años. Por ejemplo, porque registren muchos siniestros en años anteriores (no necesariamente mortales).
El cruce de datos no solo tendrá en cuenta las actividades con más accidentes, sino que también tratará de centrar el tiro sobre el tipo de acciones que más acaban en muertes laborales. Como el uso de tractores en la agricultura o las caídas desde altura en la construcción, entre otros.
Las empresas incumplidoras de la normativa en prevención de riesgos laborales, que arriesgan la vida de sus plantillas, se enfrentan a las multas más elevadas que existen en materia laboral. Por infracciones muy graves pueden llegar a los 983.736 euros en el grado más alto, tras el aumento del 20% de las multas que se aplica desde octubre. Además del enfoque de control y punitivo, el Ministerio destaca la actuación preventiva, la que en lugar de sancionar el accidente mortal evita que este se produzca. Para ello, se desplegarán también campañas publicitarias de concienciación y guías de prevención para los centros de trabajo, ha indicado Díaz.
La vicepresidenta Yolanda Díaz ha subrayado que “la precariedad puede matar” y, en concreto, ha señalado la temporalidad como un factor de riesgo. En este sentido, la directora de la Inspección de Trabajo, Carmen Collado, ha destacado uno de los datos del reciente informe del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo: las ETT (empresas de trabajo temporal) registran la mayor tasa acumulada de accidentes mortales de trabajo.
Con 22 fallecimientos y una población trabajadora media de 15.898 personas entre 2017 y 2019, el estudio sitúa a las ETT como aquella actividad con una mayor tasa acumulada de fallecimientos: 138,38. La sigue la demolición y preparación de terrenos, con una tasa de 127,96, y el transporte de mercancías por carretera y servicios de mudanza, con un dato de 88.45.
Collado ha recordado que las ETT, englobadas en un mismo CNAE (Clasificación Nacional de Actividades Económicas), en realidad abarcan multitud de sectores diferentes y no son un sector en sí mismo, pero ha destacado el dato “revelador” que las sitúa en la cima de los accidentes mortales.
La vicepresidenta Yolanda Díaz ha afirmado que “el cambio continuo de trabajos, la falta de exigencias y la imposible cultura de prevención en plantillas en constante rotación” exponen a los trabajadores a más peligros. “Todos los estudios señalan también que la experiencia es un factor clave de la prevención. Si hoy trabajas de mozo de almacén, la semana que viene de camarero y la siguiente de auxiliar de obras, no se acumula experiencia preventiva ni cultura de prevención en esos centros de trabajo”, ha añadido.