Aunque tengamos la sensación de estar acompañando al genial Bill Murray en Atrapado en el tiempo, la vida sigue ahí fuera. En especial, para la fauna. Vídeos y cámaras en directo nos sirven de ventana para que la naturaleza en su estado más puro entre en nuestros salones y habitaciones, y nos ofrezca confort durante estos días de confinamiento.
Además, este 22 de abril el Día de la Tierra cumplió 50 años con miles de millones de personas de todo el mundo encerradas en sus casas, esta vez nos toca celebrarlo de un modo más digital que nunca. Por ello, y para hacer una llamada a la conservación de la biodiversidad como modo de evitar nuevas pandemias, hemos seleccionado algunas de las mejores cámaras en directo y vídeos para disfrutar de toda esta vida salvaje desde el sofá.
1. SEO: ver nacer al halcón peregrino
La Sociedad Española de Ornitología SEO/BirdLife tiene instaladas cámaras para disfrutar de las aves desde muy cerca, sin molestarlas y sin salir de casa. A través de sus diferentes webcams podemos adentrarnos en los nidos y vidas familiares de algunas de las especies más emblemáticas de la fauna ibérica, como el buitre negro, el halcón peregrino, el cernícalo primilla o la espectral lechuza. Incluso puedes asistir en directo a momentos únicos: como el nacimiento de estos polluelos de halcón peregrino.
2. La sabana africana, en directo
Elefantes, leones, leopardos y muchas otras especies aparecen a diario por las cámaras en directo de Africam, una espectacular y enorme pantalla para la explosión de vida africana que ven millones de personas a diario.
3. Cachorros de lince en Huelva
Los cachorros de Nota, Nársil y Guitanilla crecen, mordisquean y se revuelcan con sus hermanos mientras aprenden todo lo necesario para valerse por sí mismos y sobrevivir ahí fuera cuando llegue el momento de ser liberados. No es sencillo: estos pequeños son cachorros de lince ibérico, Lynx pardinus, un felino endémico de la Península IbéricaLynx pardinus catalogado como especie “en peligro” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN); aunque hasta 2015 su nivel de amenaza era de “peligro crítico”. Podemos ver sus progresos en directo, gracias a las cámaras que el Programa de Cría en Cautividad del Lince Ibérico Lynx ex situ ha colocado en el centro de cría del lince ibérico de El Acebuche, en Huelva.
4. YouTube: pantalla de la vida salvaje
Los optimistas vídeos de delfines y cisnes recuperando los canales de Venecia o de elefantes dándose un garbeo por las ciudades chinas de la provincia de Yunnan, por desgracia, fueron un bulo. Aun así, cierta vida salvaje sí parece estar aprovechando algunos espacios vacíos ahora que millones de personas en todo el mundo permanecen confinadas para frenar la expansión del coronavirus.
No es ningún misterio: se llama nicho ecológico, y ahora que la mayoría estamos en casa es normal que la fauna periurbana o que ya habita cerca de ciertos núcleos de población humana aproveche la tranquilidad y la falta de competencia para buscar comida. Hemos visto a jabalíes aprovechar la inusual tranquilidad en Barcelona para rebuscar entre los matorrales, a osos pardos bajar hasta los pueblos de montaña asturianos.
También a rebaños de cabras trotar por ciudades galesas sin nadie que las moleste. No es la única especie protegida que está encontrando un respiro: los conservacionistas en Tailandia han censado este mes el mayor número de huevos de tortuga laúd (Dermochelys coriacea) de los últimos 20 años.
5. Focas y frailecillos en las islas Shetland
Cuando baja la marea, en esta playa de las islas Shetlandesta playa de las islas Shetland, en Escocia, aparecen las focas para remolonear y tomar en sol en sus piedras. En esta otra instalada en los acantilados, todo está preparado para esperar la llegada de los frailecillos. Mientras, es fácil ver araos, gaviotas e incluso alguna que otra liebre.
6. La tranquilidad de contar ovejas
Un rebaño de ovejas que pace durante más de seis horas en un viñedo californiano. A veces la cámara se acerca para captar a una que sestea plácidamente bajo el sol entre comidas, o una madre oveja que lame la cabeza de su pequeño cordero. Pero mayormente, comen. Y, a veces, algunas balan. Puede parecernos poco activo, pero estas ovejas demuestran una determinación y capacidad de concentración envidiables. Un recurso estupendo para tener de fondo mientras teletrabajas.
Vídeos y noticias que nos recuerda que la vida sigue ahí fuera. Y que nos ofrecen un baño de tranquilidad, y algunas lecciones, en esta era de desconcierto y angustia que atravesamos.
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