Álava dice 'no' a la construcción del parque eólico de Laminoria por no ser “asumible” ni para la fauna ni para la flora

La Diputación de Álava ha concluido en un informe que el impacto ambiental que se derivaría de la construcción del parque eólico de Laminoria sería de “una magnitud crítica, no asumible” para las aves y los animales de la zona. En el escrito, adelantado por 'Argia', se arguye que el proyecto “causaría un perjuicio muy grave sobre los procesos ecológicos esenciales” y afectaría también “muy seriamente a la coherencia y a la integridad de la Red Natura 2000”, de conservación de la biodiversidad. Fechado a comienzos de junio de este año, el escrito sí deja la puerta abierta, por el contrario, a la instalación de un parque solar fotovoltaico en la zona, pues estima que los efectos ambientales negativos serían, en ese caso, de una “magnitud asumible”.

El proyecto objeto de este informe está promovido por Aixeindar, una sociedad que está participada por el Gobierno vasco a través del Ente Vasco de la Energía y por Iberdrola. Constaba de dos patas: era por un lado eólico y por el otro fotovoltaico. En el caso del primero, había proyectada la instalación de ocho aerogeneradores repartidos entre los municipios alaveses de Arraia-Maeztu y San Millán, aunque algunos de ellos se colarían parcialmente en territorio del de Iruraiz-Gauna. Cada uno alcanzaría los cinco megavatios de potencia. El escrito de la Diputación apunta también a que existiría la necesidad de construir ocho cimentaciones de hormigón armado de cerca de 22 metros de diámetro en la parte baja. Se aportan algunos números: una campa de obra de 5.000 metros cuadrados y unos movimientos de tierras y ocupaciones derivadas de las actuaciones que se elevarían hasta los 420.000 metros cúbicos.

Una vez obtenida la energía, y según se desprende del informe que analiza los planes para el parque, esta se conduciría a una subestación transofrmadora de nueva construcción en San Millán, desde la que luego discurriría hasta conectarse con la de Elgeta. Estos puntos, sin embargo, no entraban aún dentro del ámbito de actuación del proyecto, pues compartirían infraestructuras con el parque eólico de Azazeta y por tanto habrían de evaluarse por separado.

“Valores ambientales sobresalientes”

A la hora de evaluar el posible impacto del parque, en el informe se hace especial hincapié en que la zona goza de “unos valores ambientales sobresalientes, siendo destacable en especial por su valor avifaunístico excepcional y por su importancia determinante para la conectividad ecológica, al localizarse en un entorno de transición entre la Montaña y la Llanada Alavesa cubierto por bosques muy longevos de especies autóctonas de frondosas (quejigales y hayedos muy ricos en biodiversidad)”. La zona, se prosigue, “ejerce como nexo conector que garantiza el mantenimiento de los procesos ecológicos entre los numerosos espacios naturales protegidos de la Red Natura 2000 del entorno”. Esta red, diseñada por la Comisión Europea, persigue conservar la biodiversidad.

Se destaca, asimismo, que en la zona hay ámbitos con especies amenazadas tanto de flora como de fauna. Se mencionan, en la primera categoría, especies de acebo, tejo y narciso. Entre los animales, hay águilas que nidifican en las inmediaciones, así como alimoches, buitres, milanos, quebrantahuesos, águilas reales, búhos reales, halcones peregrinos, aguiluchos cenizos y buitres negros. Hay en la zona también hasta veinte especies diferentes de murciélagos. La Diputación afea a los promotores del proyecto que apenas haya llegado a identificar “un 40%” de todas las especies con presencia en la zona. El esfuerzo de seguimiento, dice, “es insuficiente y realizado en un año [el de 2022] de especiales condiciones climáticas adversas”. Este periódico ha tratado de recabar la versión tanto del Ente Vasco de la Energía como de Iberdrola acerca de estos extremos, pero todavía no ha tenido respuesta a sus preguntas.

Aun y todo, y con esa aproximación limitada a la riqueza animal y vegetal de la zona, se considera que ya significa “el excepcional valor para la avifauna del área del proyecto”. “Esta calidad ambiental, en particular avifaunística y de quirópteros, está bien asentada y viene de antaño, siendo fruto de las características propias o intrínsecas de todos estos parajes poseedores de una gran biodiversidad”, se remacha. Se acompaña el informe de la Diputación de una larga lista de asuntos destacables en lo tocante a la biodiversidad, como que la zona forma parte de otras áreas de interés o que contiene diversos elementos incluidos en el Catálogo de Paisajes Singulares y Sobresalientes de Álava.

Se da la circunstancia de que el informe de junio de 2024 viene dado por Amaia Barredo, a la sazón diputada foral de Sostenibilidad, Agricultura y Medio Natural, aunque ahora consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca del Gobierno vasco de Imanol Pradales. Los detalles del proyecto, sin embargo, salieron publicados en el Boletín Oficial del País Vasco en enero de 2023, cuando Barredo se desempeñaba como viceconsejera de Medio Ambiente.