El programa de atención dental infantil (PADI) ampliará la cobertura para llegar también en Euskadi a los menores de 6 años. En el Consejo de Gobierno de este jueves, en el que todo ha quedado eclipsado por el anuncio de que las elecciones vascas se celebrarán el 21 de abril, se ha aprobado también una larga lista de medidas, entre las que se cuenta la de destinar 7,5 millones de euros a extender una atención bucal gratuita que hasta ahora se limitaba anualmente a alrededor de 200.000 niños de edades comprendidas entre los 7 y los 15 años.
Ya a lo largo de 2023 se había hecho una ampliación para que niños de 5 y 6 años “con dentición permanente en riesgo o con caries” pudieran acceder a las ventajas del programa PADI. También pueden beneficiarse de ellas las mujeres embarazadas y los pacientes oncológicos, a los que se les brinda en las propias consultas de Osakidetza.
Desde hace tres decenios, en Euskadi, y a través del programa PADI, se viene brindando asistencia bucodental a los niños de entre 7 y 15 años, porque se considera que es “una franja de edad determinante para el desarrollo de una buena dentición y unos hábitos de cuidado saludables”, según se subraya en el resumen de los acuerdos adoptados en el Consejo de Gobierno. Se estima que alrededor de 200.000 niños reciben atención sin coste cada año. “Con la revisión anual que incluye el PADI, el dentista puede detectar y tratar precozmente las caries en las etapas de erupción dental y recambio hacia la dentición permanente, aunque no se perciba ninguna alteración o molestia. Además, permite proporcional los cuidados preventivos y reparadores y reforzar los hábitos de higiene bucal necesarios. Acudir a las consultas periódicas es una forma de proteger y cuidar la salud bucodental tanto de la infancia como de la edad adulta”, recalcan desde el Gobierno vasco.
PADI incluye una revisión anual con el objetivo de tratar las caries con precocidad y paliar sus efectos, que pueden hacerse patentes incluso sin haber síntomas. “Las bacterias de la boca pueden inducir daño en la superficie del diente o esmalte y provocar su destrucción. En la infancia el riesgo de aparición es mayor y su avance más rápido, pudiendo dejar secuelas irreversibles”, afirma el Gobierno vasco.
Para poder acceder a las ventajas de PADI, se puede usar un talón que se recibe en el domicilio (que tendrá una apariencia similar a esta) o, en caso de no tenerlo, la tarjeta individual sanitaria, aunque en este último caso hay que firmar un documento que se conoce como “de aceptación”. Basta con elegir un dentista de una lista cerrada (que se puede consultar en este enlace) y concertar una cita. Se cubren, según se explicita desde el Gobierno vasco la revisión anual (aunque puede que se requieran más, que también quedarán cubiertas), orientación sobre cuidados bucodentales, procedimientos preventivos, sellado de fisuras, tratamiento de caries y traumatismos, extracción de piezas dentales y atención de urgencias dentales. Los empastes en dientes de leche y los tratamientos de ortodoncia quedan excluidos de la cobertura de PADI.
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