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Europa no es culpable

Ya he votado. Lo he hecho por correo. En tiempos oscuros para la política hubiera sido fácil no hacerlo, pero yo prefiero ejercer mi derecho. Es legítimo no hacerlo, pero hay que tener claro que no votar puede implicar que estás harto y que ta da igual quien salga. Probablemente no hay opción perfecta, pero siempre hay alguna que nos gusta más que otra. Yo voto y así me siento más libre para criticar.

La esencia de la democracia es el derecho al voto como la suma del pensamiento individual constituye el demos, el sujeto que conforma las mayorías y minorías y pone y quita gobiernos. Es sencillo. No hay sujeto mayor a cada individuo. No hay familia, pueblo, nación, comunidad de vecinos... No hay nada que supere la suma individual del voto, la esencia de la democracia, la ciudadanía.

Cada uno es libre de hacer lo que le venga en gana, pero la gran abstención no sirve para nada. Si los partidos no nos gustan pues habrá que cambiarlos y si los políticos no nos convencen pues lo mismo, pero fuera de eso llamado democracia solo hay dictadura. Nadie dijo que fuera perfecta.

Y miro a Europa y tampoco comparto los movimientos populistas antieuropeos. Entiendo la fatiga y comparto que ha habido políticas erróneas, pero esas se cambian y el voto es una herramienta. Sé porque nacen los populismo tan al alza en muchos Estados miembros de la UE, que no en España. Es la fácil tesis la de que el enemigo siempre es un tercero. Nos hace irresponsables y encuentra excusas. Es la técnica habitual del nacionalismo. Da igual que uno gobierne y decida porque de todo lo negativo,el culpable de los males, siempre es el de fuera. Probablemente este es la vía populista en España.

Pero vuelvo al principio, a la pareja voto democracia. No me resisto a Pedir que voten libremente a cualquiera. El voto es tan frágil y fácil de perder que solo pensarlo me entran escalofríos. Sigo pensando que cada elección libre es un regalo. Suerte el domingo.

Ya he votado. Lo he hecho por correo. En tiempos oscuros para la política hubiera sido fácil no hacerlo, pero yo prefiero ejercer mi derecho. Es legítimo no hacerlo, pero hay que tener claro que no votar puede implicar que estás harto y que ta da igual quien salga. Probablemente no hay opción perfecta, pero siempre hay alguna que nos gusta más que otra. Yo voto y así me siento más libre para criticar.

La esencia de la democracia es el derecho al voto como la suma del pensamiento individual constituye el demos, el sujeto que conforma las mayorías y minorías y pone y quita gobiernos. Es sencillo. No hay sujeto mayor a cada individuo. No hay familia, pueblo, nación, comunidad de vecinos... No hay nada que supere la suma individual del voto, la esencia de la democracia, la ciudadanía.