La dirección de Euskal Irrati Telebista, encarnada por su directora general Maite Iturbe, no teme las peticiones de dimisión del Parlamento. Le basta con el apoyo explícito del PNV y el vergonzante de EH Bildu. Ni le importan las duras críticas que tiene que oír cada mes en el Consejo de Administración mientras le apoyen los suyos, los de Karmelo (Landa) y los “independientes”. Ni siquiera le quita el sueño las pésimas audiencias que está registrando su mandato si los informativos van bien. O la marejada laboral de fondo que se vive en el ente siempre que LAB asegure la paz social.
Lo que hace temblar a Maite Iturbe son las llamadas de Lehendakaritza. Porque cuando el equipo de Urkullu llama es que llama de verdad, como en el bolero. Y no suele ser para felicitar, lo cual es lógico si reparamos en los escasos méritos que atesora esta dirección.
La primera bronca de la que hay constancia le cayó hace unos meses a Iturbe por el tema de las audiencias. No le sentó nada bien a Urkullu la “cocina” Aramburu (Andoni Aramburu, director de Estrategia y Comunicación) a la hora de cumplir previsiones. ¿Recuerdan ustedes? En resumen, Iturbe y los suyos habían previsto alcanzar el 13% de share en 2014. Y como veían que no se caían fueron a buscar otro elefante.
Es decir que como con ETB 1, ETB 2 y ETB 3 no les llegaba (11,9% en 2014), se inventaron el elefante de ETB 4 –cadena nunca presentada y cuyas audiencias no son recogidas por los estudios de las mismas- y ya está. Y con esos datos el lehendakari se peleó con la oposición hasta que le explicaron que… bueno, tú ya sabes, en fin… El rebote fue monumental.
El segundo toque de atención fue hace menos. Antes del verano. ¿Pasa algo con la serie documental sobre el Gobierno vasco en el exilio? ¿Se ha perdido? ¿Os ayudamos a buscarla? Imagino que sería algo así.
Inquirían estas altas instancias sobre la serie documental de siete capítulos “El Gobierno vasco en el exilio. Crónica de una esperanza”. La serie fue presentada y estrenada en el Paraninfo de la UPV-EHU el 9 de diciembre de 2014 y contó, dice la nota, con “la asistencia del lehendakari Iñigo Urkullu, el rector de la UPV/EHU Iñaki Goirizelaia, la consejera de Educación, Política Lingüística y Cultura Cristina Uriarte y la directora de EiTB Maite Iturbe, entre otros”. Gustó mucho al lehendakari.
El tema es que la serie, pagada por ETB, no encontraba sitio para estrenarse en la cabeza programadora de Eduardo Barinaga, director de ETB. Dicen que llegó a barajar emitir el producto en las madrugadas de ETB 2 e incluso, no estrenarlo. Puede ser que Barinaga tuviera en mente encargar algo parecido a Baleuko, su exempresa, pero más en la línea de documental dramatizado. Algo tipo gudaris vencen a los nazis en II Guerra Mundial. Y pensara que la serie documental interfería. Que no iba a haber parrilla para todos. No lo sé.
Finalmente, y tras el toque de atención, parece que podremos ver “El Gobierno vasco en el exilio. Crónica de una esperanza” en la próxima temporada. Un año después de estar acabada y pagada. Y después lo de Baleuko. Que al final hay sitio para todos.
La última llamada ha sido en julio. Le preguntaban por la reunión solicitada por una serie de trabajadores de la casa al lehendakari para trasladarle su reflexión sobre la situación actual de EiTB. Y claro, la reacción fue la lógica, perder los papeles. La bronca a los firmantes de la solicitud al lehendakari fue tan desmedida que incluso la directora de la radio, presente en la reunión, intentó apaciguar a su jefa.
Y es que es verdad, oye. Como les dijo Maite Iturbe ¿Quiénes se creen ellos que son para pedir una reunión con el lehendakari? ¿Ciudadanos o qué? ¡Habrase visto desfachatez!
Por eso les digo, si quieren vacilar un rato a Maite Iturbe llámenla a la tele y digan que es de parte de Lehendakaritza. Verán que risas.
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