El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha ratificado la condena de tres años y siete meses de cárcel impuesta por la Audiencia Provincial de Álava al autor del robo, en una casa-palacio de Salvatierra-Agurain, de unas antigüedades y obras de arte valoradas en 19.800 euros, entre las que había un grabado de Salvador Dalí. El alto tribunal vasco ha desestimado el recurso interpuesto por la defensa de esta persona, condenada en junio de 2023 por la Audiencia de Álava como autor de un delito de robo con fuerza en casa habitada, con el agravante de disfraz, a tres años y siete meses de cárcel.
La Audiencia alavesa impuso también al procesado el pago al dueño de la casa-palacio de 11.301 euros por los daños causados en la vivienda y de 19.800 euros por los objetos sustraídos, según ha informado el Superior en un comunicado recogido por Europa Press.
Entre las piezas robadas había un facsímil de la colección de planos del navegante y cartógrafo Juan de la Cosa, un grabado firmado y numerado de Salvador Dalí, un primer tomo de 'El Quijote' fechado en 1750, una cubertería de plata de 16 servicios, un juego de té victoriano en plata inglesa, dos platos chinos de mediados del siglo XIX, dos estribos de bronce, dos espingardas bereberes, unas siete figuras de marfil de diversos tamaños, y dos jarrones de porcelana de Sèvres. También fueron sustraídas 50 botellas de vino, diversos marcos de plata que no se han podido concretar, así como un bastón de madera con incrustaciones de nácar, que fue finalmente recuperado por su dueño.
Según los hechos declarados probados por la Audiencia de Álava y que ahora confirma el Superior, el robo se produjo en la madrugada del 31 de diciembre de 2018, cuando el acusado, de acuerdo con otra persona o personas cuya identidad se desconoce, entraron por la fuerza en una casa-palacio de Salvatierra-Agurain. Del interior del inmueble se llevaron los bienes descritos, y después abandonaron el edificio saltando un muro perimetral y huyendo a bordo de un vehículo.
El acusado fue localizado por agentes de la Ertzaintza posteriormente, junto al referido coche, en una calle de la localidad alavesa. Los agentes encontraron ocultos bajo el asiento del conductor el citado bastón de madera con incrustaciones de nácar. Y en el cacheo al que sometieron al sospechosos hallaron una cucharilla de plata. Dentro del vehículo también localizaron una piqueta, una llave inglesa, varios martillos, y destornilladores. El condenado recurrió la sentencia de la Audiencia alavesa ante el Superior por cinco motivos, entre ellos por vulneración del derecho constitucional a la presunción de inocencia.
La sala de lo civil y penal del desestima todos los motivos de impugnación y recuerda que el tribunal de instancia consideró que hubo prueba de cargo suficiente para entender que el acusado fue el autor de la sustracción. El alto tribunal vasco señala que “en la sentencia apelada se ha razonado debida y suficientemente sobre la realidad del hecho delictivo, sobre la preexistencia de los objetos robados y sobre la autoría de los hechos, integrando una motivación fáctica dotada de coherencia, lógica y razonabilidad”. Contra esta sentencia cabe recurso ante el Tribunal Supremo.