Euskadi apuesta por mantener el grueso de las restricciones más allá del 28 de enero

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha adelantado este jueves su propuesta para que el grueso de las actuales restricciones contra la COVID-19 se puedan mantener más allá del 28 de enero, que es cuando expira el actual decreto aprobado antes de Nochevieja. Esta decisión se hará efectiva este viernes en la reunión ya programada de la mesa de crisis de la emergencia sanitaria, el conocido como Labi, aunque no implicará necesariamente que no haya ajustes. Por ejemplo, ya se ha conocido que se permitirá la vuelta de la competición en el deporte escolar y está en el aire también el futuro del pasaporte COVID, que está regulado en otros dos decretos independientes al de las medidas generales.

Las restricciones que se prorrogarían serían el cierre de la hostelería y de las actividades culturales como muy tarde a la una de la madrugada -un cerrojazo implícito al ocio nocturno-, una limitación general de aforos al 60% -en el caso del deporte profesional varían y son del 75% en los estadios de fútbol abiertos y del 50% en las canchas cerradas de baloncesto de más de 5.000 asientos-, la prohibición del consumo de pie o en la barra de los bares y que en las mesas de la hostelería no se reunieran grupos de más de diez personas. El uso de mascarillas, regulado por normativa estatal, quedaría también tal cual, con obligatoriedad de portarla en exteriores incluso cuando haya distancia interpersonal suficiente.

A pesar de que durante la pandemia Urkullu ha insistido en que en Euskadi las decisiones se adoptan y se comunican en el Labi, que está asesorado por una comisión técnica ahora encabezada por la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ha adelantado sus planes en una intervención en Bilbao en un acto conmemorativo del centenario del conservatorio Juan Crisóstomo de Arriaga. Allí, sin posibilidad de preguntas de los periodistas, ha explicado que la tendencia de la COVID-19 es “positiva” pero que los datos aún siguen siendo elevados y, en concreto, “peores” que los que había antes de Nochevieja cuando entraron en vigor estas medidas. “Por ese motivo, la comisión científico-técnica, las autoridades sanitarias, nos recomiendan mantener las medidas en vigor. Nos recomiendan mantener la prudencia y el rigor. Es lo que yo también recomiendo”, ha señalado en el acto cultural.

Sin embargo, queda en el aire la duración de la prórroga. En Navarra, que mantiene una regulación similar a la vasca desde Navidad, esa extensión será de dos semanas, como es habitual allí. Por otro lado, el propio Urkullu dejó en duda este miércoles la continuidad del pasaporte COVID, regulado con dos normativas diferentes, una de las cuales expira el 31 de enero. Además, su continuidad requería autorización judicial que no consta que se haya solicitado. Este certificado se pide en la hostelería, en eventos y para visitas a residencias u hospitales pero los incumplimientos son manifiestos desde hace semanas.