La 'granja' marina vasca de atún rojo tendrá un máximo de seis instalaciones sumergidas frente a la costa de Getaria
La planta marina de engorde de atún rojo, que será una especie de 'granja' sumergida de esta especie en aguas frente a la costa de Getaria, tendrá un máximo de seis instalaciones acuícolas, o jaulas en las que se meterán los peces para su alimentación, según se contempla en el proyecto piloto que desarrolla la empresa ItsasBalfegó, creada por el centro tecnológico Azti y la compañía catalana Balfegó, y que ha detallado la consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca, Amaia Barredo, en una respuesta parlamentaria. Barredo, cuestionada por proyecto por la representante de EH Bildu Naiara Fernández Madariaga, ha señalado además que el sector pesquero vasco tendrá como principal función “la captura del atún rojo en una fase inicial de la experiencia piloto”, pero que en una segunda fase, “si la experiencia piloto tiene éxito, podrán participar como asociados en la empresa de engorde y comercialización del atún rojo en colaboración con la empresa Balfegó”.
El proyecto tiene como fin el engorde en cautividad de atunes rojos, que serán capturados con redes de cerco por los arrantzales y trasladados a las jaulas para ser alimentados por la empresa Itsasbalfego con su propio personal especializado “utilizando como alimento especies pelágicas apropiadas para la alimentación del atún”, hasta que éste tenga el índice de grasa adecuado para su comercialización.
La 'granja' marina se instalará en aguas a tres millas náuticas al norte del puerto de Getaria, en Gipuzkoa. El pasado mes de octubre se inició el proceso de instalación en el mar de la dos primeras jaulas que se probarán durante el otoño y el invierno para analizar las flotabilidad, inmersión y adaptación a las duras condiciones del mar Cantábrico. Esta empresa tiene experiencia en plantas similares el Mediterráneo, pero las condiciones marítimas son muy diferentes. Las jaulas instaladas en Getaria, que son una especie de flotador con un diámetro de 50 metros con una red que tendrá una profundidad de 30 metros, están diseñadas para soportar estas condiciones y minimizar el impacto del oleaje. En caso de temporal, pueden sumergirse hasta 18 metros para proteger tanto la estructura como los peces. A lo largo del proyecto, se realizará un monitoreo mediante sensores y cámaras de última generación, que permitirán controlar en tiempo real la calidad del agua y la actividad biológica alrededor de las jaulas, asegurando una respuesta inmediata ante cualquier posible impacto ambiental.
Superadas estas pruebas está previsto arrancar la última fase en verano de 2025, cuando ya se probarán las piscinas con unos pocos ejemplares de atún rojo, alrededor de medio centenar, que serán ampliando progresivamente al igual que el número de jaulas. “Los resultados de esta fase serán evaluados por la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) para determinar si, en caso de obtener resultados positivos, la actividad comercial podría extenderse más allá de la fase piloto y cómo desarrollarla”, según señalan desde la empresa.
La compañía señala además que este proyecto, aún en fase inicial, “respeta las zonas de pesca tradicionales y no interfiere con las actividades de las embarcaciones artesanales” y que generará 40 puestos de trabajo directos y unos 200 indirectos, junto con otros beneficios económicos como el fomento de la investigación y la innovación“.
Fuentes de la empresa señalan que el proyecto tiene todas las autorizaciones y permisos necesarios para su desarrollo, incluyendo el uso de técnicas de cerco autorizadas para capturar atún rojo y que antes de recibir la autorización gubernamental, el proyecto se ha sometido a una evaluación ambiental exhaustiva, considerando todos los posibles impactos sobre el ecosistema marino y proponiendo medidas correctivas para mitigar estos efectos. Sin embargo, grupos ecologistas ya han manifestado sus dudas sobre el impacto que la instalación puede tener sobre el medioambiente marino de la zona.
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