Los interinos de las Administraciones vascas, con una de las tasas de temporalidad más elevadas de Europa, exigen poner fin al “abuso”

Los trabajadores interinos y temporales de las Administraciones vascas se han echado este jueves a la calle para reivindicar sus derechos y pedirle al delegado del Gobierno en Euskadi, Denis Itxaso, que muestre voluntad para acabar con la “situación abusiva” a la que están sometidos. Le exigen que ejerza de enlace con el Gobierno de PSOE y Unidas Podemos, de tal manera que la coalición trasponga la directiva de la Unión Europea que regularizaría la situación y pondría fin a la precariedad. Subrayan que, de entre los Estados miembros, el “abuso” se acusa particularmente en España, y, de entre las comunidades autónomas, más incluso en Euskadi.

Una agrupación de interinos nacida en noviembre de 2019 —y que arrasó en las elecciones sindicales de la sede central del Gobierno vasco de ese año— lleva la voz cantante en esta batalla. “Llevamos en situación de temporalidad cinco años, diez años... Yo, particularmente, llevo 31 años como temporal en la Administración”, señala Juan Luis Ronco, que trabaja en Lakua e impulsó la iniciativa Interinok_taldea. “Hemos llegado a este punto porque el Estado español es el único Estado miembro que no ha traspuesto la directiva europea sobre el trabajo temporal. Sí lo hizo en el ámbito privado, modificando el estatuto de los trabajadores, pero en el ámbito público estamos desamparados”, lamenta.

Señala que son varias las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que han echado abajo los motivos argüidos por las Administraciones vascas: “ni la gestión rigurosa del personal, ni las consideraciones de índole presupuestaria, ni la dificultad o complejidad de crear puestos de trabajo fijos” pueden aducirse como razones para justificar la “discriminación”. “Ante esta situación —explica Ronco—, Europa ha dicho que este abuso es un fraude de ley y esto requiere una sanción. La última sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, de 19 de marzo, indicó que esta situación de abuso tiene que ser sancionada. Sin embargo, les dijo a los jueces españoles que tenían dos vías para sancionar a la Administración abusadora: indemnizaciones económicas o la transformación de esa relación temporal en una relación fija de trabajo. Nosotros estamos reivindicando a través del delegado del Gobierno que, de una vez por todas, trasponga esta directiva europea al sector público y transforme todas las situaciones de abuso del personal interino y temporal de las Administraciones públicas en una relación fija”.

Euskadi es de hecho la comunidad autónoma de España con la tasa de temporalidad más alta en todas las Administraciones, con un 38,7%. “Incluso de toda Europa”, se queja Ronco. Apunta que son 58.700 personas —“58.700 familias”— las afectadas por esta situación. Son unos datos muy alejados de las exigencias de la Unión Europea, que fijan una meta de únicamente el 8%. Las cifras de Lakua, sede del Gobierno vasco y donde él trabaja, son incluso más abultadas: el 62% de los servicios centrales del Ejecutivo están soportados por personal interino.

¿Cuál es el perfil de los interinos? “El perfil de los que estamos en temporalidad, sobre todo en el Gobierno pero que se repite también en todas las Administraciones, es de una persona de 52 años, mujer, con cargas familiares y económicas”. Y señala que hay compañeros, otros funcionarios interinos, que están alcanzando la jubilación sin haber logrado un plaza fija en la Administración. “Fundamentalmente, este abuso en la contratación de produce cuando se destina a empleados públicos temporales a atender necesidades que, de hecho, no son provisionales, esporádicas, puntuales, excepciones o coyunturales, sino que son ordinarias, estables y permanentes”, se puede leer en el escrito remitido a Itxaso.

Según indican fuentes de la delegación del Gobierno, Itxaso está cerrando una reunión y se sentará a la mesa con los interinos a lo largo de la semana que viene. Estos, como ya adelantan en la misiva, le exigen “decisiones valientes”.