La portada de mañana
Acceder
La unión de la izquierda gana las elecciones y frena a la extrema derecha
Qué hace un anillo infantil en el baño de un campo de concentración franquista
OPINIÓN | 'Fin a la fatalidad del triunfo de la extrema derecha', por Pérez Royo

Los socialistas vascos insisten en que no pactarán con EH Bildu a pesar de los acuerdos en Pamplona

Iker Rioja Andueza

Vitoria —

0

Ante las inminentes elecciones vascas y ante el acercamiento definitivo entre el PSN y EH Bildu en Pamplona tras la moción de censura que ha hecho alcalde a Joseba Asiron, el PSE-EE insiste en que no contempla bajo ningún concepto firmar acuerdos de Gobierno en Euskadi con la coalición abertzale como tampoco apoyar al candidato soberanista, Pello Otxandiano. Eneko Andueza, el aspirante socialista, ha comprometido su “palabra” y ha prometido mantener “hasta el final” esta decisión. “No vamos a firmar ningún acuerdo ni vamos a hacer lehendakari a ningún candidato de EH Bildu. Les podré demostrar que soy una persona que tiene palabra”, ha recalcado.

“Nos separan muchas cuestiones. Nuestro modelo de país... No podemos compartir nunca ese modelo de país. También nos separa una manera y una forma de gobernar: sabemos cuál fue en Gipuzkoa [de 2011 a 2015]. Y después, evidentemente, también hay una cuestión ética que para nosotros es fundamental. Pero, de cara a gestionar el día a día, [EH Bildu] tiene un modelo de país que dista mucho del que tenemos los socialistas”, ha explicado también ante la insistencia de los periodistas Andueza, que precisamente tiene raíces en Navarra.

Para quitarse presión, ha recordado que el PNV opina algo muy similar en Euskadi y que ellos no solamente han participado en la moción de censura de Pamplona sino que entrar a cogobernar con EH Bildu a través de su marca allí, Geroa Bai. En todo caso, ha considerado mucho más probable que se produzca una alianza entre nacionalistas y abertzales a tenor de los precedentes, entre los que ha citado el pacto de Lizarra de 1998 y el 'plan Ibarretxe' de 2005.

El PSE-EE, en Euskadi, mantiene acuerdos en prácticamente todas las instituciones con el PNV. Son socios en el Gobierno vasco, en las tres diputaciones y en Bilbao y en Donostia, mientras que la coalición es inversa en Vitoria desde este año, cuando Maider Etxebarria se convirtió en alcaldesa. EH Bildu y los socialistas vascos sí han firmado pactos sectoriales en muchos ámbitos, tales como vivienda, y llegarán más, previsiblemente en la futura ley contra el cambio climático, pero Andueza ha repetido en media docena de ocasiones que no van a dar el paso que sí se ha producido en Pamplona.

De hecho, su tesis es que el PSE-EE tiene que aspirar a ganar las elecciones de 2024 “sean cuando sean” y no a que le planteen a quién va a apoyar. Le asiste a Andueza, que ha comparecido con un panel con su nombre en el que ponía también “lehendakari”, la victoria en las generales de julio, la última cita con las urnas celebrada. También ha considerado que los datos de las municipales y forales de mayo fueron “muy buenos”, principalmente por haber accedido al poder en Vitoria precisamente con un pacto con PNV y PP para desbancar a la lista más votada, EH Bildu. La pugna en las autonómicas “no va a ser cosa de dos”, ha enfatizado sobre PNV y EH Bildu y queriéndose meter entre los favoritos.

Según Andueza, el PSE-EE es “protagonista” en las instituciones vascas y las grandes medidas tienen “sello socialista”. Ha citado la reforma de la RGI, de la ley de empleo, del estatuto de los consumidores o de la normativa sobre movilidad sostenible. “No podemos hacer un balance más positivo. Hemos abierto la puerta a nuevos derechos. Esperamos en unos meses liderar una nueva etapa en Euskadi y cambiar el guion”, ha remarcado Andueza usando el que ya es su lema electoral, “Cambia el guion”.