Urkullu: “Euskadi no tiene el Estatuto que votó y Catalunya tiene uno que no votó”

El lehendakari, Íñigo Urkullu, cree que aún “hay tiempo” para evitar el choque de trenes que parece avecinarse entre los Gobiernos catalán y español por el desafío independentista y el proceso de desconexión entre Catalunya y el resto de España. Pero tiene que haber voluntad para aplicar las únicas recetas que puede ayudar a desactivar ese desenlace: diálogo, consenso y pacto. Y voluntad política. La que no ha percibido en todos estos años en el PP y en el presidente Mariano Rajoy.

Para el lehendakari -en la comparecencia de arranque del curso en Euskadi tras el tradicional Consejo de Gobierno en el Palacio Miramar de San Sebastián-, la situación actual en Catalunya, a punto de aprobar la ley de transitoriedad y la del referéndum del 1 de octubre, hunde sus raíces en la sentencia del Tribunal Constitucional de 2010, que anuló parte de un Estatut que había sido refrendado por los catalanes. “¿Qué ha sucedido en estos siete años?, ¿qué ha habido de voluntad política del Gobierno español para buscar una solución?”. La realidad, ha dicho Urkullu, es que “Euskadi no tiene el Estatuto que votó y Catalunya tiene uno que no votó” y que, además, que se sigue “sin resolver la articulación del Estado como plurinacional”. Por todo ello animó a “no esperar a que venga el 1 de octubre -fecha prevista para el referéndum independentista-, hay que hablar antes”.

Otro de los asuntos que ha estado encima de la mesa en la última reunión “discreta” entre el lehendakari y Rajoy celebrada el pasado 21 de julio es la modificación de la política penitenciaria con los presos de ETA. Urkullu cree que se ha producido cambios en los últimos meses: el desarme definitivo de ETA, el pasado 8 de abril, y la posterior decisión de los reclusos etarras de aceptar la legalidad penitenciaria.

Urkullu cree que estos y otros elementos -ha vuelto a reclamar a ETA su disolución “ojalá que lo haga dentro de un minuto, mejor que dentro de dos”- le mueven a la esperanza de un cambio de política penitenciaria por parte del Gobierno central.“Tengo la esperanza de poder ver algún resultado positivo en próximas fechas”. El Ejecutivo vasco ha presentado un plan a Rajoy para acercar a los presos etarras a cárceles que estén en un radio máximo de 250 kilómetros del País Vasco.

Reunión Erkoreka y Sáenz de Santamaría

Sobre el cumplimiento de las transferencias pendientes, Urkullu espera que “cuanto antes” se produzca la reunión prevista entre la vicepresidenta del Gobierno central, Soraya Sáenz de Santamaría, y el portavoz del Ejecutivo vasco, para desbrozar el traspaso del Régimen Económico de la Seguridad Social y de Prisiones, dos competencias calificadas como prioritarias en el acuerdo de Gobierno cerrado entre el PNV y el PSE, partidos que sustentan al lehendakari en estos momentos en Euskadi. Pero aún no hay fecha. Urkullu ha puesto en valor todos y cada uno de los acuerdos cerrados con el PP y el Gobierno de Rajoy.

Sobre el nuevo estatus político, pendiente en la ponencia de que Elkarrekin Podemos presente este mes su propuesta, Urkullu espera “contribuir a que se acuerde con el mayor consenso una formulación abierta, pero concreta de bases y principios para la reforma y actualización del autogobierno. El ideal del autogobierno se encuentra en la concordia y convivencia entre identidades diferentes”, algo que le aleja de la situación explosiva que se vive en Catalunya.