La Junta de Extremadura invertirá 1,4 millones de euros en las obras de consolidación del yacimiento arqueológico de la ciudad romana de Cáparra, entre los municipios de Guijo de Granadilla y Oliva de Plasencia, así como en la remodelación del centro de interpretación. El plazo de ejecución de los trabajos, financiados con fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, será de catorce meses.
En concreto, se ejecutarán una serie de medidas de consolidación y rehabilitación de los elementos del conjunto arqueológico así como la adaptación del mismo para la recepción de los visitantes, teniendo en cuenta la evolución de futuras excavaciones. Además, se reformará el actual centro de interpretación, derribando para ello las zonas de recepción, oficina, laboratorio y aseos, y se construirá un nuevo edificio a modo de centro de recepción de visitantes ajustado a las necesidades actuales del yacimiento y las previstas para los próximos años.
También en materia cultural, el Ejecutivo extremeño ha dado luz verde a la firma de un convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Botija (Cáceres) para restaurar el ‘Castro de Villasviejas del Tamuja’, con una dotación económica de 450.000 euros con cargo también al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. En este caso, se procederá a la restauración, consolidación y musealización de los restos exhumados en las campañas de excavación desarrolladas en el castro. Se llevará a cabo la limpieza y conclusión de la excavación de las estructuras en una serie de puntos clave para lograr el máximo realce de su monumentalidad e interés histórico.
Esta actuación se centraría en el frente de muralla del recinto norte, con la recuperación y puesta en valor de su elemento más espectacular, el bastión de sillería que flanquea la esquina sureste del recinto.
Asimismo, se construirán espacios acondicionados para la visita turística, se ampliará y renovará la cartelería con la información actualizada y se acondicionará un circuito accesible para realizar el recorrido.
El objetivo de estas actuaciones, que deben estar concluidas antes del 31 de diciembre de 2025, es mejorar la rentabilidad de los destinos rurales para generar empleo y frenar la pérdida de población, incrementar la oferta turística de Extremadura, así como mejorar y optimizar la accesibilidad de los recursos patrimoniales.