Niños y ancianos de Valverde del Fresno (Cáceres) enseñan a todo el mundo a través de Internet la lengua que les diferencia, el 'cachipurrau'. Han puesto en marcha un canal de Youtube en el que muestran las características lingüísticas de una de las variantes de La Fala, el lenguaje que conserva la Sierra de Gata y que hablan unas 15.000 personas en tres municipios.
El 'valverdeiru' o 'cachipurrau' es una lengua romance que ha sobrevivido al paso de los siglos y que ahora se difunde para investigadores y el público en general a través de las nuevas tecnologías. Todo parece indicar que su origen está en el galaico astur-leonés que se hablaba en la península en 1200, y que llega a estas tierras durante la época de la reconquista con el avance de Fernando IX de León.
El canal de Youtube 'Isu lo se di' es una iniciativa del Ayuntamiento de Valverde del Fresno y supone un reconocimiento para la lengua materna de sus habitantes. En los capítulos de Internet se sientan personas de entre 7 y más de 90 años, que van hablando y abordan diferentes vocablos a modo de juego de palabras. Hacen frases y muestran la riqueza léxica que les caracteriza.
Un verdadero experimento cultural del que pueden beber todos los investigadores interesados en estudiar este lenguaje que ha pervivido en el Valle del Jálama tras el paso de los siglos. Pueden recibir una auténtica inmersión lingüística sin moverse de casa.
18 años de La Fala como BIC
La iniciativa se ha puesto en marcha cuando se conmemora el 18 aniversario de la declaración de La Fala como un Bien de Interés Cultural y Patrimonial de Extremadura. Supuso el reconocimiento jurídico de la realidad lingüística y cultural de tres municipios de la Sierra de Gata.
Tiene tres variedades según los pueblos: 'Lagarteiru', en el municipio de Eljas; 'Mañegu', en San Martín de Trevejo; y 'Valverdeiru o Cachipurrau' en Valverde del Fresno.
Al canal de Youtube se ha sumado otras muchas actividades que han centrado su mirada en los escolares, herederos de la lengua. Destaca la lectura en público del Decreto de la Declaración del Bien Cultural traducido al 'valverdeiru' y la presentación del libro “Istu lo se le”, escrito por 16 vecinos de Valverde.
Se trata de un documento que se puede descargar y que harán llegar a las escuelas oficiales de idiomas de la Comunidad, con el objetivo de que tengan cabida el resto de dialectos y lenguas que se hablan en Extremadura.
El Canal de Internet
El 'Cachipurrau' es usado por sus gentes a diario, “de manera tranquila y orgullosa”. Cuando decidieron poner en marcha un canal protagonizado por ellos era inevitable hacerlo en su lengua, explica Manuel Pascual, concejal de Cultural y teniente alcalde de Valverde.
Sus vecinos y vecinas la escriben, la hablan, la transmiten y la viven. “Es nuestro día a día, no estamos haciendo teatro o algo para llamar la atención. Se trata de nuestra realidad”.
La Fala
El término Fala ha venido englobando a las tres hablas que se conservan en la Sierra de Gata en su conjunto, “lo que facilita la comprensión al hablar de ellas a la vez, y no tener que nombrarlas una por una”. Puede entenderse que La fala es una denominación administrativa y jurídica que engloba tres realidades diferenciadas.
Existen muchas versiones en torno a su origen, aunque Manuel Pascual apunta al momento de las repoblaciones por parte de Alfonso IX de León. Una época en la que se ofrecían terrenos a los colonos para que se instalaran en estos valles, lo que favorece la llegada de personas procedentes de Asturias, León y Galicia que también traían su lengua.
Tres pueblos y tres variedades
Llama mucho la atención las diferencias lingüísticas que existen entre los tres pueblos, situados a escasos tres kilómetros entre ellos. Es posible que se hable diferente porque los repobladores originarios procedían de territorios diferentes. Esta es la hipótesis con la que Manuel Pascual explica que tengan acentos dispares, con vocablos y construcciones únicas.
“En los 6 ó 7 siglos que se llevan hablando no han podido evolucionar tan rápido como para cambiar y separarse tanto entre sí”.
Eso sí, comparten como tronco común el galaico astur-leonés. “Décadas atrás la gente señalaba que hablábamos portugués. Sin embargo, cuando íbamos a Portugal no nos entendían. Lo mismo pasa al revés”
¿Por qué se han conservado?
Se han conservado a lo largo de los siglos porque la comunidad ha usado estas lenguas. Se trata de una zona inhóspita, de modo que los habitantes han estado lo suficientemente lejos durante siglos como para estar desconectados de la influencia del castellano.
El punto de inflexión puede encontrarse en la llegada en el siglo XX de los medios de comunicación, como la radio y la televisión, que supone una 'interferencia' con otras lenguas que hasta entonces no se había producido. También, la llegada de las escuelas y los maestros de fuera, que supuso el momento de aprender español.
“Otra cosa diferente fue la persecución que pudo tener durante el franquismo y su política de eliminar las diferencias. Afectó a estos municipios porque hubo gente que dejó de hablarles a sus hijos en sus dialectos. No querían que continuara ante la idea de la unidad de España”.
Afortunadamente las tres lenguas son hoy una seña de identidad para sus habitantes, que la miman y la usan.