La tijera en la educación extremeña deja 2.000 profesores menos, precariedad laboral y más trabas para una beca

Cuatro años marcados de crisis que han dejado huella en la educación extremeña. Los recortes se han dejado notar en el sistema educativo extremeño, y para eso solo hace falta comprobar las cifras.

En solo 3 años el sistema educativo extremeño tiene hasta 2.000 profesores menos a causa de las restricciones impuestas desde el gobierno central. También hay más precariedad laboral, con un incremento en de la tasa de interinidad, el aumento de contratos temporales, y a media jornada, y el freno a la contratación de sustitución con los docentes. Los estudiantes han tenido más trabas para disfrutar de una beca y los alumnos de Bachillerato no han disfrutado del transporte escolar gratuito.

Pese a las dificultades, tanto los sindicatos como los partidos de la oposición coinciden en que la calidad educativa no ha mermado. Piensan que el mérito no ha sido de Monago, sino del esfuerzo que han realizado durante todo este tiempo los profesores.

Balance positivo desde la Junta

El argumento básico lanzado desde la Junta es que el déficit y las cuentas no salían cuando llegó Monago al gobierno regional. La consejera de Educación, Trinidad Nogales, asegura que Extremadura está entre las comunidades que más ha incrementado los presupuestos educativos, y que con el PP se han alcanzado 10 puntos menos en la tasa de abandono escolar, del 32,6 al 22,9 en 2014.

Señala además que la ESO de los 1.000 euros ha recuperado cada año a 3.000 alumnos, y que se invertirán más de 190 millones en centros educativos.

“Ha habido un retroceso en la educación”

A pesar de este balance triunfalista, Luciano Fernández, del Grupo Parlamentario del PSOE, no tiene dudas de que han sido cuatro años de “retroceso” de la calidad y la igualdad de la educación pública.

Así estima que ha habido un recorte estos años de hasta un 70 por ciento de los fondos destinados a libros de texto, mientras se ha reducido entre un 20 y 25 por ciento la asignación que reciben los becarios. Otro de los aspectos a los que se refiere es al transporte escolar, con 7.000 alumnos de Bachillerato y FP de zonas rurales costeándose este servicio desde hace tres años.

Critica igualmente que se ha desatendido la etapa de 0 a 3 años, y que ha habido recortes de entre un 20 y 30 por ciento en los comedores escolares. Otro asunto ha sido el de los interinos, que según afirma no tienen estabilidad, ni posibilidad de integrarse en los proyectos. La tasa de interinidad ha pasado de estar en el curso 2010-2011 en el 8,61 por ciento, a alcanzar en la actualidad el 11,66%, en el caso de los interinos que cubren cursos completos.

Por parte de IU Víctor Casco también piensa que los recortes han sido una realidad en el sistema educativo extremeño, en contra de las afirmaciones del PP.

Indica que son muchos los problemas a los que se han tenido que enfrentar los estudiantes, con unas becas restringidas que solo han solucionado unos problemas mínimos, así como numerosas deficiencias y recursos en los centros que no han sido cubiertas. Ha habido casos de centros sin calefacción, goteras, e incluso un colegio con murciélagos en el caso del Colegio Extremadura de Cáceres.

Casco estima que el recorte en mantenimiento de los centros ha sido del 80 por ciento, mientras que infraestructuras para la construcción de nuevos centros han sido anunciadas ahora, cuatro años más tarde. Otro de los aspectos que critica es que no se han cubierto plazas de los profesores enfermos cuyas plazas no se cubren hasta pasados 15 días, junto con la presencia de plazas amortizadas y tres años sin oposiciones.

“Unas políticas que nos devuelven a la situación de hace décadas”

Por parte del sindicato CSI-F, Manuel Pascual confirma que el sistema educativo ha empeorado, al igual que las condiciones laborales. “Se trata de unas políticas que nos devuelven a la situación de hace décadas, y por ende al fracaso escolar y el abandono; mientras que se han perdido las condiciones laborales del profesorado”

Indica que han aumentado mucho los contratos de media jornada, sobre todo para programas especiales, al mismo tiempo que ha habido problemas de habitabilidad en los centros formativos, como falta de calefacción y otros problemas.

Por parte de CCOO, Manuel García coincide en que ha aumentado mucho la precariedad en el empleo, y se ha reducido drásticamente las asignaciones de los gastos de mantenimiento de los centros. Mientras se han incrementado las horas lectivas para el profesorado, se les ha obligado a impartir otras asignaturas.

En el horizonte, la LOMCE que ha cambiado el currículum de Primaria, y ahora el PP está inmerso en el cambio en Secundaria.

Un proceso en el que denuncia que no se está contando con los sindicatos, que “quieren hacer de prisa y corriendo, quieren adaptarlo antes de las elecciones”.