El gran desarrollo y las posibilidades logísticas e industriales del puerto luso de Sines se han convertido en una gran oportunidad para Extremadura, situada en el eje desde ahí con el Mediterráneo, de tal forma que Sines es ya una “palabra mágica” según el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara.
Así lo ha dicho en Lisboa este martes, para terminar una visita a la capital portuguesa que ha incluido entrevista con el primer ministro, Antonio Costa; el alcalde de Lisboa; presentación del Festival Internacional de Teatro de Mérida, y finalmente un desayuno de trabajo con empresarios lusos y españoles.
Sines, ampliado, y de calado profundo lo que permite buques de gran tonelaje, ya no es solo el puerto de petroleros para la refinería que hay en esa ciudad costera del Alentejo, sino que se han presentado recientemente proyectos para una zona industrial que albergaría gigantescos centro de almacenamiento y proceso de datos, o industria de fabricación de baterías para coches eléctricos.
No es solo Sines, es el complejo portuario que conforma con Setúbal, mas al norte, y la cercana Lisboa, un complejo que en las dos primeras instalaciones suponen la puerta de cables submarinos de telecomunicaciones de gran capacidad que conectan Europa con América del Sur, África del Sur, y Norte de África, en este último caso con dirección también a Oriente Medio, según ha destacado en los últimos días el primer ministro, Costa.
Además tras la ampliación del canal de Panamá, Sines es una enorme terminal de contenedores para la recepción o envío desde Europa, y la línea de mercancías con Évora, Badajoz, Mérida, Ciudad Real, Alcázar y Valencia, su salida natural hacia el centro de la Península, resto de Europa y el Mediterráneo, algo que está financiando y promoviendo la Unión Europea.
Extremadura quiere asociarse a Sines, ser tenida en cuenta como lugar para inversiones e industrias en este suroeste peninsular Madrid-Sevilla-Gran Lisboa y por eso Vara, ha asegurado este martes que Portugal es hoy un aliado estratégico en “el nuevo escenario de oportunidades para el que se prepara la comunidad extremeña”.
Nuevo ferrocarril, Évora-Badajoz-Plasencia
Ha destacado Vara en Lisboa la importancia que tienen las nuevas conexiones de tren con el país vecino, lo que contribuye al desarrollo de nuevas oportunidades para Extremadura en su vinculación con el mercado de la logística. “Cuando pensamos en futuro, pensamos en Portugal. Y en ese contexto, la palabra mágica es Sines, que ha situado a Extremadura como conexión estratégica entre el corredor Atlántico y el corredor Mediterráneo”.
En “las próximas semanas” según ha recordado, entra en servicio el nuevo trazado entre Plasencia y Badajoz, y a lo largo de 2023 se pondrá en funcionamiento la nueva línea entre Évora y Badajoz, que tendrá conexión con la Plataforma Logística del Suroeste Europeo. Ambos proyectos supondrán una importante mejora tanto el transporte de viajeros como el tráfico de mercancías.
“El desarrollo logístico experimentado en Extremadura nos coloca como punto de interconexión entre Portugal y España, lo que supone un interesante marco de oportunidades de inversión para los transitarios de ambos países”, ha señalado. Unas actuaciones englobadas dentro de la Estrategia Logística Regional que posibilitan que Extremadura pueda ofrecer a empresas e inversores suelo industrial construido y dotado de infraestructuras por una superficie superior al millón de metros cuadrados.
De nuevo la azucarera, Elysium
Ante los empresarios el presidente extremeño ha hecho un repaso por la Extremadura actual y cómo ha evolucionado la comunidad autónoma desde su último encuentro en la Cámara de Comercio e Industria Luso Española en 2016. Como ejemplo, Fernández Vara se ha referido al anuncio del grupo chino Envisión y Acciona para instalar en Navalmoral de la Mata una factoría en la que se fabricarán baterías para coches eléctricos. Un proyecto que conlleva una inversión de 1.000 millones de euros y la creación de 3.000 empleos.
Fernández Vara ha señalado que este último anuncio es la consolidación de otros proyectos que “están tomado forma” en Extremadura como el Centro Logístico de Amazon, en Badajoz; la fábrica de cátodos en la provincia de Cáceres; la azucarera en Mérida; el ecopolígono CC Green de Cáceres; la fábrica de diamantes sintéticos de Trujillo; o el proyecto de ocio y entretenimiento de la comarca de La Siberia.
“Ante esta nueva realidad, nuestro reto es dejar de ser región Objetivo 1 y pasar a ser un territorio que contribuya en la parte que nos corresponda. Pero para lograrlo, ahora que Extremadura tiene alas para volar, que no nos las corten. Nuestra región a partir de ahora es un competidor más y, en este proceso, la colaboración y alianza con Portugal es fundamental”.