Unidas anuncia que se retira de la negociación presupuestaria ante el “paripé” de la Junta

La portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha anunciado que su grupo no se volverá a sentar en la negociación presupuestaria con el Gobierno regional con vistas a las cuentas regionales 2025, si la Junta continúa con su “paripé” y no afronta un diálogo real con los grupos parlamentarios. 

Irene de Miguel, que ha comparecido en rueda de prensa junto a los otros tres diputados de su grupo, ha indicado que la Junta de Extremadura demostró ya al inicio hace una semana de las negociaciones que estas “son una farsa y que no hay ningún espíritu por llegar a ningún acuerdo presupuestario” con fuerzas políticas como la suya. 

En ese sentido, ha recordado que lo primero que les dijo la consejera de Hacienda, Elena Manzano, es que “no iba a mover una coma de su política fiscal”, que pretende emular, a juicio de Miguel, a la de Isabel Ayuso en Madrid en beneficio de las clases más privilegiadas. 

“Decir que no se puede cambiar la política fiscal y negarse a poner nuevas figuras impositivas como la que le planteábamos a las grandes infraestructuras fotovoltaicas, es un portazo a las negociaciones y cierra cualquier posibilidad de acuerdo”, ha dicho la portavoz de Unidas. 

Para Irene de Miguel, en la “escenografía montada por la señora Guardiola ella tiene muy claro quienes quieren que sean su pareja de baile”, por lo que antes incluso de iniciarse las conversaciones le hizo “un guiño directo” a Vox con los 20 millones de euros para el regadío de Tierra de Barros. 

Este dinero, en su opinión, “no supone nada para el proyecto y lo único que hace es volver a aumentar las ilusiones y las expectativas de unos agricultores que han visto como se les ha estafado”. 

“Nosotras creemos que este circo debe de acabar ya”, ha insistido, para “no seguir alimentando la agonía de un proyecto muerto”. 

La portavoz de Unidas ha destacado que con el “fanatismo fiscal del PP” es muy difícil afrontar los retos que tiene Extremadura y acometer “una batería valiente y ambiciosa de inversiones” como la que su grupo había planteado. 

Entre sus propuestas, ha recordado, estaba acabar con las listas de espera, disminuir las ratios en educación, aumentar el número de plazas en los comedores escolares de Primaria y también de Secundaria o incrementar en 1.000 las plazas en centros residenciales para mayores. 

Unidas planteó también controlar el precio del alquiler de viviendas en Extremadura, la comunidad autónoma en la que los jóvenes más tardan en emanciparse, así como una renta agraria universal para garantizar un relevo generacional en el campo. 

Para todo ello, se necesita más presupuesto, por lo que “negarse a mover una coma en la política fiscal de recaudación de impuestos es negarse directamente a afrontar los retos que tenemos y a transformar la realidad de los extremeños y extremeñas”, ha insistido De Miguel. 

Abandonan el “paripé” de la negociación presupuestaria porque ellos no quieren ser “la muleta de un PP que solo mira por sus intereses y no por los intereses de la ciudadanía”.