La electrocución de un ave por la falta de medidas preventivas en los tendidos eléctricos por parte de la empresa distribuidora ha sido la causa determinada por la Guardia Civil del incendio que se produjo el pasado agosto en el municipio pacense de Salvatierra de los Barros, en el que se quemó una hectárea de pastos.
En una nota de prensa, la Benemérita ha informado de que el fuego tuvo su origen tras el choque de un cernícalo primilla con el tendido eléctrico de alta tensión, que cayó sobre el terreno como una bola de fuego.
El informe pericial apunta que, una vez examinada la zona, ha quedado constatado que la línea eléctrica no se encontraba adaptada a las prescripciones técnicas establecidas en la normativa vigente para la protección de la avifauna, carentes de medidas preventivas que minimicen los riesgos de colisión y especialmente de electrocución de las aves.
El Seprona ha instruido diligencias a la empresa distribuidora de energía eléctrica por un supuesto delito de daños originados por el incendio, que han sido remitidas al Juzgado de Instrucción de Jerez de los Caballeros.