Funcionarios de la cárcel de Cáceres abortan el intento de fuga de un recluso
Varios funcionarios de servicio de la prisión de Cáceres han abortado este viernes un intento de fuga de un interno, que pretendía huir con la ayuda de cuerdas trenzadas, hechas con sábanas, saltar el muro del patio del módulo dos y después el primer muro de los dos que separan la prisión del exterior, según ha informado el sindicato CSIF. Como consecuencia de su acción, el interno se ha ocasionado numerosos cortes en los brazos a causa de las cuchillas de las concertinas.
Se da la circunstancia que este recluso fue el que “agredió salvajemente el pasado 7 de junio de 2021 a un funcionario de la prisión de Badajoz”, al que “golpeó e intentó estrangular”, según ha asegurado el sindicato. En la actualidad cumple una condena de 17 años y ha llegado a la prisión de Cáceres procedente de la prisión gaditana Puerto I, progresado de primer grado. CSIF ha afirmado que se trata de un interno “muy problemático” con numerosos antecedentes de agresiones tanto a funcionarios como a otros internos.
El momento en el que se ha producido el intento de fuga, en el departamento se encontraban únicamente dos funcionarios de servicio, “algo muy habitual debido a la falta de personal que soporta la prisión cacereña”, ha denunciado el sindicato, que también ha manifestado la dificultad de los funcionarios para controlar todos los espacios porque los módulos del centro cacereño tienen dos plantas y la planta baja.
A raíz de este episodio, CSIF ha recordado el caso de otro interno que el pasado 7 de diciembre se subió al tejado portando cuerdas trenzadas de sábanas, así como el de otro recluso que durante la noche manipuló los barrotes, situaciones que fueron detectadas a tiempo por los funcionarios de servicio. Por esto, considera que la prisión cacereña “no reúne los requisitos de seguridad para albergar internos de este perfil” y ha instado a la dirección a que solicite el traslado de este interno y de otros que tampoco deberían estar por sus antecedentes.
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