Dos pueblos de Extremadura han hecho historia. Se necesitaba el apoyo de dos tercios de los vecinos y se ha conseguido. Don Benito y Villanueva de la Serena dicen “sí” a la fusión y comienzan un nuevo camino de manera conjunta después de una consulta popular histórica.
Cinco meses después del anuncio de fusionarse por parte de los alcaldes de ambas localidades extremeñas, los vecinos han respaldado este proyecto. El 90% de los villanovenses han votado a favor de la unión mientras en Don Benito el porcentaje ha caído hasta el 66,27%, el mínimo establecido para comenzar este proceso de unión que desembocará en 2027 cuando se vote el primer equipo de gobierno que dirigirá la nueva ciudad, que superará los 64.000 habitantes.
El alcalde de Villanueva de la Serena, Miguel Ángel Gallardo, ante los datos de participación y los resultados en su municipio, ha asegurado estar “muy agradecido y orgulloso” y ha subrayado que “el 90% de síes ha sido un resultado abrumador”.
En concreto, en Villanueva de la Serena, han votado un total de 12.573 electores de los 21.331 que tenían derecho al voto. Un apoyo mayoritario el que se ha dado a la unión entre las dos ciudades, ya que solo un 9,03% ha votado “no” a la unión y el 0,48% corresponde a los votos en blanco.
En Don Benito, el recuento de los más de cuatro mil votos por anticipado han hecho posible ese apoyo del 66,27%, que se situaba minutos antes en el 61% y dejaba en el aire la fusión.
Durante la comparecencia de ambos alcaldes, el alcalde de Don Benito, José Luis Quintana, ha afirmado que el domingo se ha “dado una lección” y ha reconocido que se asumía un “riesgo muy elevado” marcando el 66% pero van a conseguir “cambiar el rumbo de Don Benito y Villanueva y del municipalismo español”.
La unión de ambos municipios ya contaba con el apoyo de todos los grupos municipales, los alcaldes de las nueve entidades locales menores que pertenecen a ambos municipios, de los grupos parlamentarios en la Asamblea de Extremadura y de todos los presidentes de la Junta de Extremadura, desde Guillermo Fernández Vara, hasta José Antonio Monago y Juan Carlos Rodríguez Ibarra.
Quedan años con una ardua tarea en los que se tendrán que elaborar los planes más técnicos, como los estudios de solvencia municipal, la unificación de normas tributarias y planes urbanísticos ,así como de los servicios públicos y trabajadores municipales. Aunque antes habrá que salvar otro escollo: el concurso de ideas para crear las señas de identidad de la nueva urbe, su nueva denominación. Mientras tanto, se construirá un núcleo administrativo en la zona del hospital comarcal, aunque el compromiso es descentralizar los servicios públicos.