Las plataformas en contra de la instalación de la macrocelulosa de Altri en la comarca lucense de A Ulloa han viajado a Bruselas para contar todo lo que les atemoriza del proyecto. La diputada del Bloque Nacionalista Galego, Ana Miranda, les ha reunido en la capital europea para escuchar sus opiniones y ponerles en contacto con altos funcionarios de la Comisión Europea que deberán decidir si el proyecto cumple los requisitos medioambientales y si es susceptible de recibir dinero público, procedente de la cuenta para patrocinar proyectos que descarbonicen.
La formación nacionalista prepara una denuncia ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo para “alertar” de que la concesión de fondos para Altri puede acabar suponiendo una degradación medioambiental grave en Galicia. El calendario no ayuda a los nacionalistas; con las elecciones europeas a la vuelta de la esquina Bruselas funciona a medio gas y es por ello que la formación está deliberando si esperar a la nueva legislatura o empezar a tocar ya las puertas de despachos en los que se están empezando a realizar mudanzas.
En su periplo ante las instituciones europeas, el BNG se ha acompañado de portavoces de plataformas como Ulloa Viva, Plataforma en Defensa da Ría de Arousa, ecologistas como Adega y Ecoloxistas en Acción y alcaldes y concejales de las poblaciones más afectadas por el proyecto.
La portavoz nacionalista se ha mostrado convencida de que el proyecto de Altri no pasará los controles ambientales exigidos por la UE y que tendrá muy difícil demostrar que su puesta en funcionamiento no tendrá afectación medioambiental sobre el entorno en el que se pretende ubicar. La puesta en común de ideas entre los colectivos que participan de la resistencia al proyecto lleva a una misma conclusión: Altri supondrá un daño medioambiental irreparable para Galicia y un consumo de agua a 75 años vista, que no se puede defender en el actual contexto de cambio climático.
Los miembros de los colectivos tuvieron la ocasión de trasladar sus preocupaciones a María Teresa Fábregas, directora del grupo operativo para el mecanismo de recuperación y resiliencia y Paul Speight, jefe de la unidad de cumplimiento de la normativa medioambiental. Los dos altos funcionarios confirmaron a la delegación que no hay todavía ninguna candidatura presentada para que Altri reciba el dinero público sin el cual la empresa asegura que no llevarán adelante su proyecto. Esos fondos, incluídos en el PERTE de descarbonización, todavía no han sido convocados y de ellos depende en gran medida que la macrocelulosa continúe sus pasos para instalarse en Galicia. Antes incluso de que Altri se muestre en Europa, el BNG se ha encargado de anunciar su llegada y avisar de los riesgos que entraña el proyecto. En palabras de Ana Miranda, lo que Altri pretende hacer es “un gravísimo atentado medioambiental