La planta que Ence tiene en la ría de Pontevedra ha contado en los últimos meses y años con el apoyo del Gobierno gallego para mantenerse en su actual emplazamiento, pero el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha cambiado su postura y ha introducido en el debate la posibilidad de un traslado de la pastera. Para lograr ese cambio de localización, se ofrece para buscar fondos europeos que ayuden a financiarlo y a negociar con las administraciones implicadas para lograr el visto bueno.
No es la primera vez que se plantea esta opción. Hace más de una década, el PP gallego hizo suya la bandera de un traslado de Ence a otro emplazamiento, fuera de la ría, pero en la misma comarca. Entonces, un recién elegido Feijóo en su primer mandato, apoyó esta alternativa, que terminó quedándose en un cajón. La empresa ha manifestado en varias ocasiones en los últimos meses su oposición a esta salida, que no considera viable. Su objetivo es permanecer en Lourizán hasta 2073.
El presidente gallego ha vuelto a recurrir este jueves, tras la reunión del Consello, a las consideraciones económicas y de empleo para oponerse al cierre “inmediato” de la polémica fábrica. De ella dependen “miles” de puestos de trabajo y Galicia afronta una crisis derivada de la pandemia: “Ence no puede cerrar mientras no haya otra fábrica de pasta de papel que se ubique en la comunidad”. Su postura, ha manifestado, es “conocida”. Cree que el emplazamiento en la ría “no es el mejor” y que existe la posibilidad de llevar la pastera a otro sitio si se encuentra un lugar adecuado y fondos para hacerlo. El dinero, propone, puede venir de la Unión Europea y de la propia empresa: “No le vamos a regalar un traslado al cien por cien a una compañía”. “Pero tiene que ser por este orden: primero mantenemos Ence y luego pensamos qué hacemos”, ha defendido.
Ha admitido que la empresa dice que no se quiere mover, pero con las condiciones de que haya fondos europeos y de Ence, la Xunta trabajaría con el resto de administraciones para “buscar emplazamiento”. No lo ha restringido a esta compañía. El Gobierno gallego facilitará la instalación de otra pastera en la comunidad: “Ojalá podamos buscar otro emplazamiento a Ence o a otra pastera. Necesitamos dos”. Citó como ejemplo la posibilidad de que haya interés de una empresa finlandesa.
Feijóo no ha concretado qué fondos europeos podrían dar cobertura a esta operación, aunque ha citado que hay líneas para la transición energética y ecológica. Sí ha aclarado que Ence no ha presentado ningún proyecto de traslado a los fondos Next Generation.
El presidente gallego ha aprovechado para cargar contra la Ley de Cambio Climático, aprobada en el Congreso y que se está tramitando en el Senado. “Si el ministerio lo único que hace es una ley para decir que aquellas concesiones que no estén definitivamente ortogadas no podrán mantener sus emplazamientos... Eso es un párrafo destinado exclusivamente a Ence. Lo que persigue el artículo 18, entre otras cosas, es cerrar Ence”, ha manifestado.
La Xunta ha criticado, al igual que la propia empresa, la redacción de este apartado de la ley. La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, acusó al PP de haber presionado para “desactivar el proceso de control judicial” de la fábrica. El artículo hace referencia a que las concesiones en dominio público marítimo-terrestre no podrán superar los 75 años, sumadas las prórrogas. Este plazo se cumple en 2033 en el caso de la pastera en Pontevedra. La prórroga concedida en 2016 por el gobierno de Mariano Rajoy en funciones está recurrida en la Audiencia Nacional.