Las listas de espera quirúrgica en Galicia suelen formar parte del debate político, tanto del discurso del Gobierno de Núñez Feijóo como de las críticas de la oposición. Los últimos datos, correspondientes a 31 de diciembre de 2019, dejaron la espera media por una operación en 54,5 días, una reducción en los datos globales debidos a la mejora en las cifras del área de Vigo (la que habitualmente presenta los indicadores más negativos) pero que oculta un empeoramiento en el resto de Galicia, ya que la espera media aumentó casi 10 días en los hospitales públicos de la provincia de Ourense, 5,3 en los centros de Lugo, 4,4 en el área sanitario de Ferrol, 3,6 en la de Santiago, 3 en la de A Coruña y 1,2 en la de Pontevedra.
Para 13.563 personas a espera se situaba entre los 3 y los 6 meses, otras 5.801 tenían que esperar entre 6 y 12 meses y para 510 la espera superaba los 12 meses
Con todo, también hay que esperar habitualmente por pruebas diagnósticas de todo tipo, desde las de radiología ( ecografícas, TACs, resonancias...), a las endoscopias o a estudios de todo tipo (alergías, cardiologías, respiratorios, del sueño...). Esta espera varía mucho de unas pruebas a otras y también es muy distinta en unas y en otras zonas de Galicia.
En total, la finales del 2019 la cifra de personas que esperaban por una prueba diagnóstica en el SERGAS era 84.879. En la mayor parte de los casos (65.005), la espera era inferior a los 90 días, pero otras 19.874 personas tenían que esperar más de tres meses. Para 13.563 personas a espera se situaba entre los 3 y los 6 meses, otras 5.801 tenían que esperar entre 6 y 12 meses y para 510 la espera superaba los 12 meses.
Las pruebas más habituales con lista de espera son las radiológicas, que representan ocho de cada diez. En ellas, la espera media se mantiene estable en los últimos años, moviéndose entre los 56,6 días del año 2014 y los 66,5 días de 2016. En el 2019 espera media en radiología fue de 59,9 días. Con todo, las esperas para las ecografías abdominales son superiores (75,4 días), el mismo que para las resonancias magnéticas (64,8 días).
El resto de pruebas suma un menor número de casos y la espera media varía mucho más de año en año. En cualquiera caso, son las endoscopias las que acumulan un mayor retraso, que fue descendiendo en los últimos años, hasta los 119,8 días de 2019. La espera media para los estudios es de 59,3 días en los últimos datos, descendiendo notablemente desde los más de 162 días del año 2014. Finalmente, la espera media en las pruebas de electrofisiología fue de 48,9 días el pasado año, aumentando ligeramente.
A pesar de la mejora en el número medio de días espera, la cantidad total de personas que esperan por pruebas diagnósticas (84.879) creció en el 2019 con respecto a 2018 (82.047) y consiguió su cifra más alta desde lo 2016 (88.371).
En cambio, se redujo ligeramente la cantidad de personas que espera más de 90 días. Las 19.874 de 2019 son casi mil menos que las 20.895 de 2018 y cuatro mil menos que las 23.952 de 2017.
En el último lustro el 2016 fue el año con más personas esperando por una prueba diagnóstica y también con más pacientes con esperas superiores a los tres meses, más de 27 mil. Por el contrario, en el año 2014 las cifras eran más bajas que en la actualidad, con 68 mil personas esperando pruebas y solo 19 mil con esperas superiores a los 90 días.
Vigo es el área sanitaria con mayores listas de espera para la realización de pruebas diagnósticas, debido a los retrasos en la realización de pruebas de radiología, las más numerosas. La espera media se sitúa en los 88 días en Vigo, por encima de los 65 días de Ferrol o los 53 días de Santiago y Lugo.
En el área sanitaria de Vigo la espera media por una ecografía abdominal se sitúa en los 114 días, por una ecografía musculoesquelética en los 113 días y en las resonancias magnéticas por encima de los 89 días. Por ejemplo, en A Coruña las ecografías abdominales tienen esperas de 53 días (dos meses menos) y por una resonancia magnética hay que esperar 72 días (17 menos). Los indicadores vigueses empeoraron notablemente en el año 2019, pasando las resonancias de 71 a 89 días y las ecografías abdominales de 91 a 114 días.
En las endoscopias las cifras más elevadas (con gran diferencia) correspondieron en el 2019 a las áreas sanitarias de A Coruña y Cee (153,9 días), que más de suplican los datos de Lugo, el siguiente área con más espera y multiplican por cinco los número de la mayor parte del resto del país.
Ferrol y Lugo presentan las mayores esperas para la realización de pruebas de electrofisiología. Y de nuevo Ferrol tiene los peores datos para la realización de estudios, con un promedio de 111 días, por encima de los 66 días de Vigo, el segundo área con más espera.