Cinco administraciones se reunirán este miércoles, a las cinco y media de la tarde, para discutir los usos futuros del Pazo de Meirás. El encuentro lo ha convocado en la Delegación del Gobierno en A Coruña la vicepresidenta del Ejecutivo central, Carmen Calvo, y a ella asistirán los ayuntamientos de Sada y A Coruña, la diputación provincial y la Xunta de Galicia. La familia Franco deberá entregar al Estado el inmueble y todo los que contiene el diez de diciembre, es decir, el jueves.
A la llamada de Calvo han respondido los regidores de A Coruña, la socialista Inés Rey, y de Sada, Benito Portela, de Sadamaioría. Este último ya ha avanzado que llevará una propuesta para que sea su municipio, donde se encuentra Meirás, el que se encargue de gestionar la apertura “lo más pronto posible” y las entradas al lugar. Desde A Coruña, el propio pleno municipal ha reclamado -con la abstención del PP- que se convierta en un centro de la memoria histórica. El Gobierno gallego todavía no ha confirmado la asistencia de Feijóo, pero sí sus planes para Meirás, y en ellos la memoria del franquismo y la dictadura apenas tiene lugar.
A la reunión también acudirán Valentín González Formoso, el presidente de la Deputación da Coruña, una de las instituciones más activas en el proceso que ha desembocado en la histórica sentencia que obliga a los descendientes del dictador a reintegrar el pazo a lo público, y el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada.