Transparencia versus estigma. En esa dualidad se ha situado este jueves el presidente de la Xunta Alberto Núñez Feijóo para justificar la negativa de su Gobierno a ofrecer los datos sobre contagios de coronavirus por ayuntamientos. Galicia es una de las comunidades que nunca ha querido llegar a ese umbral de transparencia. Ahora, por primera vez, la Xunta explica sus razones: “No es un problema de ocultación, es un problema de prudencia”.
El barón gallego del PP ha argumentado por primera vez su resistencia a la transparencia en las cifras: “Dar infectados por ayuntamientos nos parece peligrosísimo”. En el desarrollo de su justificación, Feijóo ha señalado que “hay personas con nombre y apellidos detrás que conviene proteger ante estigmas en localidades pequeñas”. Lo que el Feijóo parece insinuar es que con solo dar la cifra de contagiados de una pequeña población, los vecinos de esa localidad harán el resto de la investigación localizando y señalando a quienes hayan resultado infectados por COVID-19.
El presidente de la Xunta parece olvidar cuando uno de sus históricos alcaldes, el de Lalín (Pontevedra) pedía justo lo contrario: elaborar listas de infectados con nombre y apellidos para que todo el mundo pudiera localizar los focos y protegerse de ellos. También distrae Feijóo sus propias decisiones del pasado, como cuando prohibió el derecho al voto de los infectados por COVID en las elecciones del 12J, sin que ningún tribunal de garantías avalase tal pretensión.
Con la decisión de ocultar estos datos la Xunta consigue dos cosas: la primera, dificultar el juicio sobre las decisiones de su Gobierno cada vez que limitan derechos fundamentales en unos ayuntamientos y no en otros. También aporta opacidad ante cualquier problema de gestión en un foco determinado de contagio. Sin datos públicos, quien tiene acceso a esa información gana tiempo y capacidad de reacción pero se la niega al resto de los ciudadanos.
Sea como fuere, la foto fija del coronavirus en Galicia no sale ni saldrá en mapas como este que ha elaborado la sección de datos de eldiario.es y en la que se pueden ver cuáles son los puntos más complejos en cuanto a evolución de la pandemia. Todo porque Feijóo considera que “es una decisión muy comprometida para los infectados y para el consenso admitido de protección de datos”.