La Xunta propone imponer a Endesa dos multas por el episodio de contaminación que afectó en octubre de 2020 al río Eume y le reclama que pague una cantidad similar para reparar los daños ocasionados y las obras que la administración gallega asumió en la potabilizadora de Pontedeume (A Coruña), un municipio cuyos habitantes tuvieron que dejar de consumir agua del grifo durante días.
Augas de Galicia, organismo dependiente de la Consellería de Infraestruturas, ha informado a la empresa de la propuesta de resolución para imponerle dos sanciones por la contaminación de las aguas, que permanecieron turbias varias jornadas. Entre ambas multas, suman 950.000 euros. Por reparación de daños, la Xunta le reclama 932.284 euros. La eléctrica ya ha anunciado que analizará la documentación y presentará recurso, informa Europa Press. Lo ocurrido está siendo investigado por la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo.
Después de que las aguas resultasen contaminadas, la directora de Augas de Galicia, Teresa Gutiérrez, dijo en el Parlamento que Endesa lo había hecho “rematadamente mal”. La acusó de hacer una “explotación irregular del embalse” y de desobedecer “órdenes” de la Xunta. “Lo que no es normal es que, de repente, por una mala explotación haya un episodio de turbidez como el que ha habido; por eso hemos abierto expediente”, afirmó entonces.
La propuesta de sanción de Augas de Galicia indica que la empresa desatendió el requerimiento notificado por este organismo el 8 de agosto de 2020, en el que le pedía a la empresa, que explota un embalse en el río, que cumpliera con el régimen de explotación habitual y mantuviese la cota mínima de explotación en 306 msnm (metros sobre el nivel del mar) para garantizar el mantenimiento del caudal ecológico. Endesa, añade, continuó con el proceso de descenso de cota no autorizado hasta el día 28, “momento en el que se constata la aparición de turbidez en el embalse”. La Xunta no aprecia “ningún atenuante” en esta forma de proceder, por lo que propone la sanción máxima prevista en la ley de aguas de Galicia, que es de 600.000 euros.
La segunda multa se debe a que la eléctrica modificó el régimen de explotación del embalse sin autorización administrativa, con lo que incumplió las obligaciones que le corresponden como titular de la presa, “con graves consecuencias”, según la Consellería. En este caso se consideraron atenuantes que la empresa está tramitando la autorización administrativa de las normas de explotación del embalse del Eume y que los controles llevados a cabo en su plan de vigilancia ambiental del proceso de descenso “sirvieron para detectar la turbidez e interrumpir el descenso programado”, lo que permitió evitar “una afección aún mayor”. En este caso, reclama la sanción mínima, de 350.000 euros.
La misma ley prevé que, con independencia de las sanciones, se podrá exigir a los infractores la reparación de los daños y perjuicios ocasionados al dominio público y la reposición de las cosas a su estado anterior. De acuerdo con esto reclama, en concepto de indemnización, los más de 930.000 euros que la administración pública desembolsó para la potabilizadora.
Endesa tiene ahora un plazo de 15 días hábiles para presentar alegaciones a estas resoluciones. Una vez transcurra, Augas preparará el expediente oportuno para ser elevado al consejo rector del organismo, el competente al tratarse de sanciones tipificadas como muy graves. La empresa ha defendido su forma de actuar y atribuye lo ocurrido a un episodio de lluvias torrenciales.