La Dirección General de Consumo de Balears ha abierto un expediente sancionador a Pescanova, proponiendo de forma provisional una multa de 48.000 euros, por el producto denominado 'pasta del mar', tras una denuncia de Facua.
Según ha informado la organización de consumidores, la Dirección General balear considera que la denominación del producto implica una infracción grave de la normativa de consumo, al considerar el nombre publicidad engañosa.
En detalle, la normativa establece que la categoría de pastas alimenticias se aplica a productos “obtenidos por desecación de una masa no fermentada elaborada con sémolas, semolinas o harina procedente de trigo duro, trigo semiduro o trigo blando o sus mezclas y agua potable”. Sin embargo, ninguno de los tres productos comercializados como 'pasta del mar' lleva estos ingredientes.
Además, Facua también consideraba que la publicidad es engañosa en cuanto al contenido real de pescado. La organización de consumidores incide en que, aunque el producto lleve en su nombre un tipo concreto de pescado como reclamo -tallarines de bacalao, tallarines de salmón y espaguetis de merluza con tinta de sepia-, no son los únicos con los que están elaborados.
Por ejemplo, detalla Facua, los espaguetis de merluza llevan un 17% de merluza y un 40% de “proteína de pescado”, “sin dar más detalles sobre las especies utilizadas”. En los tallarines de bacalao el bacalao representa un 37%, al que se suma un 28% de merluza; y en los tallarines de salmón hay un 36% de salmón y un 22% de “proteína de pescado”.
En la resolución que firma el director general de Consumo de Balears, Félix Alonso, se considera que la comercialización de estos productos “induce a error” sobre “la verdadera naturaleza” de los mismos, “al confundirse con pasta alimenticia”. También considera una infracción la denominación con un tipo de pescado en particular teniendo en cuenta los porcentajes de composición, y el hecho de que en la lista de ingredientes de los espaguetis con tinta de sepia no se indique la cantidad de tinta utilizada.
Por todo ello, Balears propone una sanción provisional total de 48.000 euros atendiendo al “elevado volumen de ventas” de Pescanova y que afecta a “bienes de uso o consumo común, ordinario y generalizado”.
La asociación también denunció los hechos ante el Ministerio de Consumo, que desde mayo tiene potestad sancionadora ante este tipo de prácticas, pero hasta la fecha no han recibido respuesta.