Ecologistas denuncian que el empresario de Ibiza detenido por un presunto delito medioambiental sigue dañando posidonia

Nicolás Ribas

Eivissa —
17 de agosto de 2022 22:37 h

0

Evaristo Soler Cardona, el empresario de Porroig (Sant Josep, Eivissa) que está siendo investigado por un presunto delito contra el medioambiente, continuó ejerciendo su actividad ilegal el pasado domingo en la bahía, según denuncia la entidad Salvem sa badia de Portmany, solo tres días después de que elDiario.es publicara en primicia su detención por la Guardia Civil y posterior puesta en libertad, a la espera de ser reclamado por el juez o jueza cuando lo estime oportuno -según confirmaron fuentes del Instituto Armado a esta redacción-.

Esta actividad consistiría en la colocación de muertos (estructuras de fondeo de embarcaciones) encima de la posidonia, planta marina protegida por la legislación vigente, que luego son alquilados a embarcaciones y yates de la zona para fondear. Además, según han denunciado en innumerables ocasiones activistas, ecologistas, vecinos y propietarios de las casetas varadero de Porroig, allí son habituales las actividades de chárter irregular, utilizando el embarcadero como puerto para cargar y descargar turistas (para realizar excursiones). Este periódico ha intentado ponerse en contacto con Soler Cardona sin éxito.

“Los chárteres legales también están haciendo algo ilegal”

A unos diez metros de la costa, Soler Cardona tendría unas siete u ocho lanchas que utilizaría como base de operaciones y que iría moviendo hacia el lugar de algunos de los muertos que coloca para tenerlos ocupados, según las imágenes y vídeos que recibió esta redacción el pasado domingo y que fueron, en algunos casos, distribuidos posteriormente por la plataforma Salvem sa badia de Portmany -entidad centrada, sobre todo, en vigilar estas prácticas en el municipio de Sant Antoni, también en Eivissa-.

Estas prácticas están generando mucha tensión y malestar entre los bañistas, vecinos y vecinas y propietarios de las casetas varadero de la zona, que frecuentan la cala especialmente los sábados y domingos para disfrutar de ella. De hecho, el domingo 7 de agosto, varios de ellos se enfrentaron a los trabajadores de chárteres impidiéndoles entrar en la bahía (entre los que no se encontraba Soler Cardona, apuntan otros testigos de la zona), según publicó este periódico el martes 9 de agosto. Durante esa tarde, los mismos testigos afirman haber contabilizado entre 40 y 50 embarcaciones entrando y saliendo de la bahía.

“Los chárteres legales también están haciendo algo ilegal, porque necesitan un puerto base (para realizar su actividad). No pueden embarcar y desembarcar turistas en la bahía de Porroig”, asegura la testigo que grabó las imágenes, citando para ello el decreto 21/2017 que regula la actividad de alquiler de embarcaciones y buques de recreo en Balears y la ley 14/2014 de navegación marítima, que consta de algunas excepciones como que las embarcaciones sean de una eslora no superior a 2,5 metros.

Otro de los efectos dañinos de esta práctica es que se generan grandes cantidades de residuos que terminan en bolsas de basura amontonadas alrededor de los contenedores que hay en la entrada de la cala. Los vertidos ilegales e incontrolados de residuos tienen un coste para las arcas municipales, que en todo el municipio asciende a 490.000 euros anuales, según informó el Ajuntament de Sant Josep en una nota de prensa del 16 de junio. “Es un dinero que sale de los impuestos de la ciudadanía y que se podría destinar a financiar muchas otras acciones necesarias en el municipio”, explicó en la nota de prensa Mónica Fernández, concejala de Medio Ambiente. Esta práctica es otra de las quejas recurrentes de los vecinos y vecinas de Porroig.

La bahía de Porroig, en “peligro” por el fondeo ilegal

Porroig es una pequeña cala de unos 150 metros de longitud repleta de casetas varadero -de pescadores-, situada en un paraje privilegiado del suroeste de la isla de Eivissa. Este enclave, sin embargo, se encuentra en una situación muy delicada debido a la masificación de yates y embarcaciones que fondean ilegalmente durante los meses de la temporada turística.

“El impacto se produce no solo por la estructura del muerto, sino también por sus cadenas de borneo que dan vueltas alrededor del muerto arrasando la posidonia, como una segadora”, explicó a elDiario.es Xisco Sobrado, técnico del Área Marina del GEN-GOB Eivissa, entidad ecologista que realizó un estudio para el Ajuntament de Sant Josep valorado en 7.000 euros, con el objetivo de estudiar la situación del fondo marino de la bahía y contabilizar los muertos colocados ilegalmente.

El Govern balear, a través de la Conselleria de Movilidad, prevé implementar un campo de boyas ecológicas en Porroig en verano de 2023, una medida que Sobrado considera necesaria para revertir la situación. “Aunque se implementara una zonificación de fondeo, quitando todos los muertos, la pradera de posidonia tardaría mucho tiempo en recuperarse y regenerarse”, aseguró. Varios buceadores profesionales consultados por este periódico coincidieron en señalar -opinión compartida por Sobrado- que se necesita “más vigilancia y seguimiento” por parte de las autoridades competentes, balizamiento y el citado campo de boyas ecológicas.

“Ahora tenemos normativa y regulación, es decir, las autoridades pueden sancionar y exigir la aplicación de la ley. Se puede llamar al 112 y avisar a la Guardia Civil (SEPRONA), pero las autoridades están desbordadas porque hay mucha presión de embarcaciones”, lamentó, por su parte, Joan Carles Palerm, presidente del GEN-GOB Eivissa, que asegura que es en la bahía de Porroig donde se realizan actividades de chárter ilegal de manera “más exagerada”.

Este periódico publicó por primera vez las presuntas actividades delictivas de Evaristo Soler Cardona, ahora investigado por la Guardia Civil y a la espera de ser citado por el juzgado a declarar -acusado de un delito contra el medio ambiente-, el pasado 13 de julio. En ese momento ya estaba siendo investigado por estos hechos -confirmaron fuentes del Instituto Armado y del Ministerio de Transición Ecológica a esta redacción-.

La investigación se desencadenó en el contexto de los trabajos de limpieza del fondo marino para el desmantelamiento de los muertos ilegales entre los días 11 y 26 de abril, que encargó el Ajuntament de Sant Josep (pese a no tener competencias en la materia) a las dos empresas de buceo profesional de la isla, Eivisub y Servisub, cuyo coste ascendía a 37.000 euros. Estas tareas extrajeron 91 de los 112 muertos identificados por el GEN-GOB Eivissa en la bahía, según informó el Consistorio.

Denuncia de “amenazas de muerte” ante la Guardia Civil

Un mes después, cuatro miembros de la plataforma Maltesa del Mar, que trabaja desinteresadamente en la limpieza de fondos marinos como los de Porroig, Sa Caleta o Pou des Lleó, presentó una denuncia contra Evaristo Soler Cardona -en dependencias de la Guardia Civil- por haber sido, supuestamente, “amenazados de muerte”. Estas amenazas -siempre según consta en la denuncia- se produjeron después de que dos de sus miembros se sumergieran en las aguas de la bahía para inspeccionar y grabar el estado del fondo marino, donde identificaron, como mínimo, una decena de muertos más, que podrían haber sido colocados por el denunciado después de los trabajos de limpieza encargados por el gobierno municipal.

“No quiero volver a veros por aquí, tengo seguro, así que te paso por encima, te mato y no pasa nada”, les advirtió presuntamente Soler Cardona, según la denuncia presentada por Maltesa del Mar. Además, este se habría dirigido a ellos con su pequeña embarcación, a menos de dos metros de distancia, increpándoles y exigiéndoles explicaciones sobre por qué estaban allí y qué es lo que estaban haciendo, siempre según la denuncia. Por este motivo, temiendo por su “integridad física”, volvieron a la orilla. En dicha denuncia, se explica que el denunciado habría manifestado ser “la persona que manda allí” y “conocido”, tanto por los vecinos y asiduos de la zona como por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Después de lo ocurrido, Pablo Montoto, biólogo marino y miembro de Maltesa del Mar, avisó al 112 para que una patrulla de la Policía Local acudiera al lugar de los hechos. Pasado un rato, como ello no sucedió y continuaron recibiendo amenazas e insultos -siempre según la denuncia-, decidieron abandonar el lugar.

El 18 de junio, Soler Cardona volvió a ser denunciado, esta vez por desobediencia a los agentes de la autoridad y “faltas de consideración”, por lo que se enfrenta a una multa de entre 600 y 30.000 euros, informó la Policía Local en redes sociales. Esta nueva denuncia se produjo en el contexto de las labores de limpieza de muertos que estaban realizando los buceadores de Protección Civil de Sant Josep, bajo la supervisión de agentes de la Policía Local del municipio.

La empresa Rescuesub S.L. facturó 0 euros en 2020

Mientras se producían los hechos denunciados por Maltesa del Mar en la bahía de Porroig, Soler Cardona les explicó -también según la denuncia- que tenía una S.L. (empresa) y que su actividad es legal. Creada en 1999, la empresa Rescuesub S.L., de la que él es administrador único, se encuentra inactiva, según la documentación que consta en el Registro Mercantil, a fecha de 20 de junio. Esta empresa, además, facturó 0 euros en 2020, último ejercicio disponible, según los mismos datos del Registro Mercantil, recopilados y analizados por elDiario.es a partir de la plataforma Insight View, que muestran unos activos de 124.519 euros y un capital social de 27.046 euros.

elDiario.es ha intentado hablar con Soler Cardona a través de la empresa Contisa, que le asesora, que explicó que el empresario se pondría en contacto con este periódico. Sin embargo, a fecha de 17 de julio -semanas después de haber contactado por primera vez con Contisa-, no ha sido posible recabar su versión sobre los hechos que se investigan en Porroig. Asimismo, este miércoles, elDiario.es ha vuelto a llamar a Contisa y ha redactado un email para hablar con el empresario, pero sin éxito.