Contar con la experiencia de los ‘ex’ al mismo tiempo que se da una patada hacia adelante en los temas calientes de la UE. Es la estrategia de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que en la recta final de su mandato, y sin saber aún a ciencia cierta si seguirá tras las elecciones europeas de junio, ha encargado a los ex primeros ministros de Italia Enrico Letta y Mario Draghi sendos informes sobre el mercado único y la competitividad con la vista puesta en las reformas que se deben llevar a cabo. La alemana ha decidido, además, pedir al expresidente finlandés Sauli Niinisto un estudio para preparar a la sociedad europea para la defensa.
La primera idea la adoptaron los líderes de los 27 el pasado junio, cuando decidieron pedir un informe de alto nivel sobre el futuro del mercado único. Tres meses después la Comisión Europea, y las presidencias belga y española, anunciaron el nombre de Enrico Letta como muñidor de ese texto que servirá de base para una de las reformas necesarias, entre otras cosas, de cara a la ampliación de la UE.
Letta tiene una dilatada carrera política, ha sido docente y dirige uno de los think tanks por antonomasia en la capital comunitaria. La idea es que el informe sobre uno de los puntales de la construcción europea esté listo el próximo 10 de abril y, por lo que ha esbozado el italiano en algunas entrevistas, abordará cuestiones como la fuga de talento a los grandes países de la UE que debilita a las regiones menos desarrolladas. “Hasta ahora teníamos el mercado único como libertad de movimiento. Ese era el centro de todo. Me gustaría añadir la libertad para quedarse”, explicó en una entrevista en Politico.
El gran meollo del mercado único es, en todo caso, el de las ayudas de estado, que han generado una enorme distorsión desde la pandemia. De los 760.000 millones de euros que se han autorizado bajo el paraguas del Marco Temporal de Crisis, Alemania ha copado el 47,2%; Francia, el 22,6%; e Italia, el 7,7%. “Las ayudas estatales son una excepción.Y deben seguir siéndolo. Necesitamos una política industrial europea.No una fragmentación nacional”, agregó Letta en esa entrevista.
Casi en paralelo a que se revelara el nombre Letta como el elegido para dar cumplimiento a la petición del Consejo Europeo, Von der Leyen anunció que le había solicitado un trabajo similar al también exprimer ministro italiano Mario Draghi. En el caso del expresidente del BCE, la intención es que analice la competitividad de la UE, que es una de las grandes patatas calientes por la feroz competencia de potencias como Estados Unidos o China que han obligado a los 27 a repensar su industria y a lanzarse al proteccionismo.
Además de profundizar en el intervencionismo, Draghi ha lanzado la advertencia de que la UE debe movilizar una “enorme cantidad” de dinero para no quedarse atrás. Sólo para competir en las transiciones ecológica y digital la UE tendría que invertir 500.000 millones de euros al año y cerrar así la actual brecha con países como Estados Unidos.
Tanto Draghi como Letta están en contacto con los estados miembros para la elaboración de sus análisis, que en el caso del expresidente del BCE no se prevé que esté listo hasta el mes de junio.
Discrepancias en la UE por la retórica de la guerra
El último ‘ex’ al que le ha caído una petición de Bruselas ha sido al que fuera presidente de Finlandia Sauli Niinisto. En este caso, Von der Leyen le ha reclamado un análisis de la estrategia de defensa ciudadana que hay en ese país. Por debajo subyace la retórica bélica que está promoviendo una parte de la UE, entre ellos la actual presidenta de la Comisión Europea, que en su última intervención ante el Parlamento Europeo apremió a los 27 a reforzar los ejércitos bajo la premisa de que el estallido de una guerra “no es imposible”.
Y de ahí que sea una de las dirigentes que está abanderando el relato de que la sociedad europea tiene que estar preparada. “Finlandia siempre ha mantenido una defensa fuerte. La preparación para la defensa no es sólo una preocupación militar sino de todos. Es una preocupación de toda la sociedad”, expresó Von der Leyen en presencia del expresidente finlandés. La alemana quiere extrapolar la “estrategia” de ese país, que convive con “un vecino tan impredecible y agresivo” como Rusia, a la UE.
“La gente de Finlandia está preparada para todas las emergencias, incluidas militares, amenazas híbridas y desastres naturales”, explicó Von der Leyen, que ensalzó que la sociedad esté “preparada para mantener funciones vitales en crisis”, como “garantizar un suministro básico para la población y ayudar a las fuerzas de defensa en sus tareas”. Niinisto cogió el guante: “En la sociedad finlandesa, cada uno de los ciudadanos defiende el país”. “Es el momento de despertar”, apostilló.
Es discurso se ha topado con el rechazo de algunos dirigentes de la UE, como Josep Borrell, Charles Michel o Pedro Sánchez, que admitió que no se siente “reconocido” en discursos que apelan a “convertir a Europa en una economía de guerra” o con “expresiones que tengan que ver con la tercera guerra mundial”.
Por el momento, Von der Leyen ha encargado un informe que, según dijo, tendrá que estar listo en otoño para servir de guía al próximo gobierno comunitario. Aunque no está escrito que ella siga al frente, sí es la favorita.