La portada de mañana
Acceder
16 grandes ciudades no están en el sistema VioGén
El Gobierno estudia excluir a los ultraderechistas de la acusación popular
OPINIÓN | 'Este año tampoco', por Antón Losada

El jefe del Mundial de Fútbol en Qatar, sobre la homosexualidad: “Las muestras de afecto están mal vistas para todos”

elDiario.es

1 de diciembre de 2021 17:47 h

0

A menos de un año de la celebración en Qatar del Mundial de fútbol masculino, el presidente del comité organizador, Nasser Al Khater, ha asegurado que “todo el mundo es bienvenido”, tras ser preguntado sobre el jugador australiano Josh Cavallo, que anunció en octubre que es homosexual y dijo este mes en una entrevista con The Guardian sentirse “asustado” de ir al país del Golfo.

En declaraciones a la CNN, Al Khater ha asegurado que “le dan la bienvenida” y que “nadie” se siente “amenazado” o “inseguro” en Qatar. El presidente ha dicho que Cavallo tiene esa percepción “después de leer estas acusaciones [de que Qatar no es seguro para el colectivo LGTBI] o de leer estas noticias que arrojan una luz negativa”. Al Khater ha calificado al país como “tolerante”, “acogedor” y “hospitalario”.

A la pregunta de si la homosexualidad es ilegal en Qatar, Al Khater se ha limitado a decir que “las muestras de afecto en público están mal vistas, de forma generalizada”. El catarí ha dicho que Qatar es un país “modesto” y ha pedido a los fans que vayan al Mundial que “respeten” que el país es “mucho más conservador”. “Respetamos las diferentes culturas y esperamos que otras culturas respeten la nuestra”, ha añadido. Sí ha reconocido que el matrimonio entre personas del mismo sexo es ilegal, “como en muchos otros países”.

“Ellos [personas homosexuales] vendrán a Qatar como aficionados a un torneo de fútbol. Pueden hacer lo que haría cualquier otro ser humano. Lo que digo es que Qatar, desde el punto de vista de la demostración pública de afecto, es conservador”, ha reiterado.

Según la organización en defensa de los derechos LGTBI Stonewall, en Qatar están prohibidos los “actos sexuales entre personas del mismo texto. La organización dice que estos actos son castigados con penas de cárcel de uno a cinco años, según los artículos 296 (3) y 285 del Código Penal. También lo recoge un informe de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex (ILGA), que señala que ”ciertas fuentes“ indican que la homosexualidad es castigada con penas de muerte.

La preocupación sobre los derechos de las personas LGTBI es un tema recurrente en el mundo del fútbol después de la celebración del Mundial de fútbol masculino en Rusia hace tres años. O, más recientemente, la negativa en junio por parte de la UEFA de iluminar el estadio de Múnich con los colores del arco iris para el partido de la Eurocopa 2020 entre Alemania y Hungría, a raíz de una ley anti-LGBTI aprobada por el Parlamento húngaro.

Sobre los trabajadores inmigrantes

Al Khater también ha hablado sobre las acusaciones de las brutales condiciones a las que se enfrentaban cientos de miles de trabajadores inmigrantes encargados de preparar lo necesario para el Mundial. Las investigaciones sobre el trabajo forzado y la servidumbre por deudas han causado indignación a nivel internacional.

Según una investigación de The Guardian, más de 6.500 trabajadores inmigrantes de India, Pakistán, Nepal, Bangladesh y Sri Lanka han muerto en Qatar desde que el país del Golfo fue nombrado organizador del Mundial de fútbol masculino. Los registros de defunción no estaban clasificados por ocupación o lugar de trabajo, pero fuentes consultadas por el medio británico decían que es probable que muchos trabajadores estuvieran empleados en proyectos de infraestructura de la Copa del Mundo

El presidente del comité organizador ha reiterado que rechaza la veracidad de esta investigación. “Niego categóricamente las informaciones de The Guardian”. Y ha añadido: “Esto es algo que debe quedar absolutamente claro. Absolutamente claro. El número de víctimas mortales en los estadios del Copa del Mundo que están relacionadas con el trabajo es tres. Hay algo más de 30 víctimas mortales que no están relacionadas con el trabajo”.