Los líderes de la UE dan un voto de confianza a Israel pese a la masacre en Gaza
La UE va evolucionando en su respuesta al conflicto entre Israel y Hamás entre el doble rasero y los equilibrismos. Los 27 reconvinieron el apoyo incondicional a Benjamin Netanyahu de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, al poner el derecho internacional como límite a la autodefensa tras los atentados del 7 de octubre. Tras dos semanas de asedio a Gaza y con miles de víctimas civiles, los líderes europeos alcanzaron un acuerdo de mínimos para reclamar “corredores y pausas humanitarias” que permitan llegar la ayuda. Ahora bien, midieron cada palabra para no cuestionar explícitamente la respuesta de Israel.
“El Consejo Europeo reitera la importancia de garantizar la protección de todos los civiles en todo momento en consonancia con el Derecho internacional humanitario. Lamenta profundamente toda pérdida de vidas civiles”, recogen los 27 tibiamente en sus conclusiones del Consejo Europeo.
No desairar a Israel es uno de los leitmotiv de los jefes de Gobierno europeos, especialmente de Alemania y Austria. De hecho, la evolución en la respuesta se ha producido conforme Estados Unidos ha ido abriendo el paso. Cuando Joe Biden vetó en la ONU una resolución que pedía una “pausa humanitaria” ante la catástrofe en Gaza, la puerta se cerró en la UE; pero se aceptó el llamamiento a “pausas humanitarias” cuando Washington lo hizo.
A lo que prácticamente nadie en la UE se atreve es a condenar la actuación de Israel y, a pesar de la masacre de la población civil, se le está dando un voto de confianza. “Israel es un Estado democrático que se rige por principios muy humanitarios y, por tanto, uno puede estar seguro de que el ejército israelí también observará las normas derivadas del derecho internacional en lo que haga. No tengo ninguna duda al respecto”, aseguró el canciller alemán, Olaf Scholz, este jueves.
“Para juzgar si se ha vulnerado el derecho internacional, lo primero, el propio país, en este caso Israel, tiene que asegurar que hace todo lo posible para estar dentro del derecho internacional y es lo que le pedimos”, afirmó el primer ministro holandés, Mark Rutte: “Es lo que creo que hace Israel porque es un país democrático”.
Mientras que nadie duda en condenar los ataques terroristas de Hamás y definir como “crímenes de guerra” la captura de rehenes, muy pocas voces han señalado a Israel por incumplir la legalidad internacional.
Sí lo hizo el alto representante, Josep Borrell, al asegurar que “algunas decisiones son contrarias al derecho internacional” en referencia al asedio a la Franja de Gaza. En términos similares se ha pronunciado el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. “Un asedio total no es conforme al derecho internacional”, señaló tras la reunión con los líderes. Pero por escrito, ni una palabra al respecto.
Sánchez no ha querido ir tan lejos como Borrell o Michel, pero ha marcado distancias con Israel. “Creo que es una duda legítima que podemos hacernos todos después de ver las imágenes, el sufrimiento y el desplazamiento de más de un millón de gazatíes desde hace tres semanas”, ha respondido en una rueda de prensa tras la reunión del Consejo Europeo en la que tenía una mayor ambición respecto al cese de las hostilidades en la Franja de Gaza que lo que finalmente se acordó: “Desde España hemos defendido siempre un alto el fuego humanitario. En aras del consenso, rebajamos eso hacia una terminología que gozara de mayor consenso”.
La pausa humanitaria porque la prioridad debe ser la liberación de los rehenes de manera inmediata y sin ningún tipo de digamos condición y, en segundo lugar, porque con esa pausa humanitaria estaríamos permitiendo que los trabajadores y trabajadoras de las ONGs que están destacadas en la franja de Gaza pudieran hacer su trabajo“. ”Son ya demasiados los muertos, ya solamente con uno sería suficiente, pero creo que las imágenes que estamos viendo de una población que está sufriendo en Gaza y sobre todo de niños y niñas, de población civil que está sufriendo ese asedio y esas bombas me parece absolutamente inaceptable“, ha apostillado.
El presidente español, al igual que Giorgia Meloni o el griego Kyriakos Mitsotakis, asistieron a la Cumbre de la Paz de Egipto en un gesto al mundo árabe en un momento en el que de esa parte del mundo Occidente está recibiendo una crítica por el “silencio internacional” respecto a la violencia de Tel Aviv sobre la población palestina. Varios jefes de gobierno europeos, como el alemán, el holandés o el holandés, han acudido a Israel para que quede claro el apoyo sin fisuras.
“Todo esto pone presión a Israel”, señalan fuentes gubernamentales, que tratan de poner en valor la evolución en la respuesta que se ha producido en los últimos días. Esas mismas fuentes sostienen que exigiendo a Israel que permita el acceso a la ayuda humanitaria de alguna forma se está reconociendo implícitamente que está incumpliendo con las normas humanitarias básicas. Lo cierto es que la palabra “condena” desapareció de las conclusiones finales respecto a los borradores cuando podía atribuirse a la actuación de Israel.
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