El conservador Rishi Sunak ya es oficialmente el nuevo primer ministro de Reino Unido en sustitución de Liz Truss, que con 49 días en el cargo es la jefa de Gobierno más fugaz de la historia británica tras dimitir presionada por su propio partido a raíz de las turbulencias provocadas por su controvertido programa fiscal. Sunak es el tercer premier del país en menos de dos meses.
“En este momento, nuestro país se enfrenta a una profunda crisis económica”, ha dicho este martes al inicio de su primer discurso como jefe el Gobierno a las puertas de su residencia en Downing Street. “Las secuelas de la COVID aún perduran. La guerra de Putin en Ucrania ha desestabilizado los mercados energéticos y las cadenas de suministro en todo el mundo”.
Sunak ha afirmado que ha sido elegido líder del Partido Conservador –y en consecuencia primer ministro– para “arreglar” los “errores” cometidos por su predecesora. “No se equivocó al querer mejorar el crecimiento de este país. Es un objetivo noble. Y yo admiré su inquietud por genera un cambio. Pero se cometieron algunos errores, no nacidos de la mala voluntad o de las malas intenciones. Todo lo contrario, de hecho. Pero errores al fin y al cabo. Y he sido elegido como líder de mi partido y su primer ministro, en parte para arreglarlos”.
“Ese trabajo comienza inmediatamente. Pondré la estabilidad económica y la confianza en el centro de la agenda de este Gobierno”, ha dicho el exministro de Economía, tras lo que ha advertido de que “se avecinan decisiones difíciles”.
Sunak toma las riendas del Gobierno en medio de una difícil crisis económica, por el aumento de la inflación y los tipos de interés y el riesgo de recesión. Con 42 años, es el primer ministro más joven de la historia moderna de Reino Unido y en la primera persona no blanca, así como de religión hindú, en llegar al número 10 de Downing Street.
Nuevo Gobierno
Tras la salida de una decena de miembros del Gobierno, la composición del nuevo Ejecutivo ha comenzado a conocerse este martes por la tarde, con nombramientos que, según analiza The Guardian, son una señal de que Sunak está tratando de llegar a todo el partido. Jeremy Hunt, que asumió el cargo a mediados de octubre en sustitución del cesado Kwasi Kwarteng tras el fracaso de la estrategia económica de Truss, ha vuelto a ser nombrado ministro de Economía.
Ben Wallace y James Cleverly –nombrado por su predecesora– también repetirán al frente de Defensa y Exteriores respectivamente, según ha anunciado Downing Street. En un movimiento controvertido que ya ha sido criticado por los laboristas, Suella Braverman, del ala derechista de los tories, volverá a ser ministra del Interior, un puesto que dejó hace menos de una semana tras admitir haber violado el código de conducta ministerial en una carta en la que expresó diferencias con el Gobierno de Truss.
Por su parte, Dominic Raab, aliado de Sunak en las elecciones internas al liderazgo conservador, regresa como vice primer ministro y titular de Justicia, cargos que ocupó en el Gobierno de Boris Johnson. Nadhim Zahawi, quien apoyó el regreso de Johnson, también estará en el gabinete con un cargo que le otorga un puesto sin responsabilidades específicas y será el nuevo presidente del Partido Conservador. La rival de Sunak en las elecciones internas de los conservadores, Penny Mordaunt, ha sido reelegida como líder de la Cámara de los Comunes.
“Integridad, profesionalidad y responsabilidad”
Durante su primer discurso, Sunak se ha comprometido a unir el país “no con palabras, sino con acciones”. “Trabajaré día a día para cumplir con ustedes”, ha dicho el nuevo premier, quien ha prometido “integridad, profesionalidad y responsabilidad en todos los niveles” del Gobierno.
También ha prometido un Servicio Nacional de Salud (NHS, en inglés) “más fuerte”, y ha agregado: “Mejores colegios, calles más seguras, el control de nuestras fronteras, la protección de nuestro medio ambiente, el apoyo a nuestras fuerzas armadas, levelling up (política para reducir los desequilibrios regionales), y la construcción de una economía que abraza las oportunidades de Brexit, donde las empresas invierten, innovan y crean puestos de trabajo”.
“Juntos podemos lograr cosas increíbles”, ha concluido. Tras posar para los fotógrafos, el líder conservador ha entrado solo en la residencia oficial. El nuevo primer ministro ha llegado al número 10 desde el palacio de Buckingham, donde ha recibido el encargo formal por parte de Carlos III de formar un nuevo Gobierno. Es la primera vez que el monarca, que ascendió al trono tras la muerte de su madre, Isabel II, el pasado 8 de septiembre, pide un líder británico que forme un nuevo Ejecutivo.
El exministro de Economía se hizo este lunes el liderazgo del Partido Conservador tras resultar vencedor en un breve proceso interno para elegir un nuevo dirigente tory tras la dimisión forzada de Truss. Era el claro favorito para convertirse automáticamente en el nuevo jefe de Ejecutivo –el nuevo líder del partido también se convierte en primer ministro debido a que los conservadores tienen la mayor cantidad de escaños en el Parlamento–. Los laboristas, a los que las encuestas dan ventajas de hasta 30 puntos en intención de voto en caso de celebrarse elecciones generales, han pedido un adelanto electoral, algo que Sunak descartó ante sus colegas de partido este lunes, según informaron los medios británicos.
La despedida de Truss
Truss dimitió el pasado jueves presionada por su propio partido tras menos de seis semanas en el cargo y sumida en una profunda crisis política. Su posición en el Gobierno se había vuelto insostenible tras perder la confianza en las filas tories –divididas y temerosas de perder las elecciones generales– a raíz de la controversia en torno a su programa fiscal –con rebajas de impuestos–, que provocó turbulencias en los mercados financieros.
En una breve declaración ante la residencia oficial antes de acudir al palacio de Buckingham para presentar formalmente su dimisión al rey, Truss ha dicho este martes que ha sido un “gran honor” ser primera ministra y ha resaltado las ayudas que ha puesto en marcha para ayudar a las familias ante la crisis energética. Durante su discurso, la ex primera ministra ha hecho un llamamiento a aprovechar las “libertades” del Brexit, ha citado al filósofo Séneca y ha vuelto a defender los impuestos bajos.
“Desde mi mandato como primera ministra, estoy más convencida que nunca de que debemos ser audaces y afrontar los retos que tenemos”, ha dicho. “Nuestro país sigue luchando en medio de una tormenta. Pero yo creo en Reino Unido. Creo en el pueblo británico. Y sé que nos esperan días más brillantes”, ha afirmado en palabras muy similares a las que pronunció su llegada a Downing Street el pasado 6 de septiembre, cuando dijo estar “segura” de que el país podía “capear el temporal”.
Canciller y partidario del Brexit
En septiembre, Sunak fue derrotado por Truss, que se impuso gracias al voto de las bases conservadoras en la carrera para hacerse con el liderazgo del partido tras la marcha de Boris Johnson. El excanciller fue, no obstante, la primera opción de los diputados conservadores en la primera fase del proceso.
Hasta el 5 de julio, fue uno de los pesos pesados del Gobierno de Boris Johnson, y su dimisión al frente de la cartera precipitó la sucesión de renuncias internas que desencadenaron la caída del ex primer ministro. Su nombre ha sonado de manera reiterada en las quinielas de favoritos para hacerse con el cargo.
Sunak llegó al cargo de canciller en febrero de 2020. Previamente, el entonces aliado de Johnson había sido jefe del Tesoro desde julio de 2019. Se estrenó como diputado en la Cámara de los Comunes en 2015 tras una carrera en el sector de las finanzas –tuvo cargos en varias firmas, entre ellas el banco de inversión Goldman Sachs–. Respaldó la salida de la Unión Europea en el referéndum de 2016 y su nombre figura entre el de las personas más ricas de Reino Unido.
Una polémica en torno a los arreglos financieros de su familia minó en parte una gran popularidad granjeada en las ruedas de prensa para explicar los planes de ayuda por la COVID-19, que aprobó rápido para mantener a familias y empresas a flote y le valieron el reconocimiento público. El exministro también se vio salpicado por el escándalo de las fiestas en Downing Street, el Partygate, por el que fue multado. Aunque siempre defendió que solo estaba de paso, Sunak se vio obligado a pedir disculpas.
Sunak se crio en la ciudad de Southampton, al sur de Inglaterra, y es nieto de inmigrantes originarios de la región india del Punjab, que llegaron a Reino Unido en los años sesenta procedentes del este de África. Estudió en el elitista colegio privado de Winchester y se licenció en Filosofía, Política y Economía por la Universidad inglesa de Oxford.