La matanza en Berlín parece haber estado inspirada en el ataque terrorista con camión del Día de la Bastilla en Niza, Francia. Esta táctica se ha convertido durante el último mes en un elemento de propaganda del Estado Islámico.
Al menos 12 personas murieron y decenas resultaron heridas este lunes cuando un camión arrasó un mercado navideño en el centro de la capital alemana. La canciller Angela Merkel declaró este martes que se debe asumir que “se trata de un atentado terrorista”. Además, el ISIS ha reivindicado el ataque a través de su agencia de noticias, Amaq.
Tanto en el objetivo como en el método elegidos, el ataque de Berlín recuerda a la masacre cometida en la ciudad costera francesa en julio de este año por un residente francés nacido en Túnez. En el ataque, 86 personas fueron asesinadas y más de un centenar resultaron heridas cuando Mohamed Lahouaiej-Bouhlel arrolló con un camión de 19 toneladas a una multitud congregada en una de las principales avenidas de la ciudad para ver un espectáculo de fuegos artificiales.
Como los fuegos artificiales del Día de la Bastilla en Francia, el mercado de Navidad de Berlín es una tradición muy popular en el calendario nacional alemán y una ocasión especial para cometer un ataque.
Ambos son el tipo de “blanco fácil” resaltado en noviembre por el Departamento de Estado de Estados Unidos, que aconsejaba a los turistas en Europa que tuviesen “cuidado en las fechas festivas, eventos y mercados al aire libre”. Estos consejos del Departamento de Estado se deben al miedo a la utilización terrorista “de armas convencionales y no convencionales” para provocar el caos en el periodo navideño. Tanto en Niza y en Berlín el “arma no convencional” fue un camión atropellando a una multitud.
En las últimas semanas han aumentado los indicios de que el ISIS, mientras pierde terreno en Irak y se encuentra bajo una mayor presión militar en Siria, busca contraatacar incitando a los aspirantes a yihadistas en Occidente a llevar a cabo ataques con vehículos pesados. Las agencias de inteligencia en Europa han advertido en repetidas ocasiones de la extrema dificultad para anticipar este tipo de ataques individuales.
La edición de noviembre de la revista de la organización terrorista, Rumiyah (Roma), puso el de Niza como ejemplo del tipo de ataques que los yihadistas podrían llevar a cabo “en líneas enemigas”. “Aun siendo una parte esencial de la vida moderna, muy pocos son conscientes de la capacidad mortífera y destructiva del vehículo a motor y su capacidad de cosechar una gran cifra de muertes si se utiliza de forma premeditada”, se afirmaba en la revista. La portada de Rumiyah mostraba imágenes de un camión de alquiler de la empresa Hertz y del famoso desfile anual del Día de Acción de Gracias promovido por los grandes almacenes Macy's.
El 25 de noviembre las autoridades francesas anunciaron la detención de cinco personas que podrían estar planeando ataques en un mercado navideño de los Campos Elíseos de París y en Disneyland Paris.
En este caso, el supuesto ataque contaba con armas de fuego que habían sido escondidas para su uso posterior. La nueva estrategia del ISIS parece reflejar una nueva creencia en la que la utilización de armas de fuego puede hacer que un ataque planeado sea desbaratado por la inteligencia occidental. La utilización de los camiones es un intento de impedir esa vulnerabilidad.
El incidente de Berlín llega después de que el ISIS haya reivindicado la responsabilidad de dos ataques en Alemania este año. En julio, un sirio de 27 años llevó a cabo un atentado suicida en Ansbach, matándose a sí mismo e hiriendo a otros. El mismo mes, un hombre empuñando un hacha atacó a los pasajeros de un tren en Würzburg, hiriendo a cuatro personas.
Traducido por Javier Biosca Azcoiti