Dado que el centro del mundo del videojuego hace ya muchos años que no gira en torno a Japón, y que para colmo el mercado ha evolucionado a pasos agigantados dando cabida a nuevas propuestas como las surgidas a raíz del boom de los smartphones y las tabletas, no son pocos los estudios y editoras antes intocables como Square Enix que le están dando más de una vuelta a su esquema de siempre tratando de adaptarse a los tiempos que corren.
Uno de los pasos a seguir según la propia compañía es occidentalizar buena parte de sus grandes producciones para consola y poner el ojo con cada vez mayor atención en el citado mercado de los juegos para móviles. Pero atención, todo ello sin perder unas señas de identidad históricas, dado que de su factoría han surgido joyas como la saga Final Fantasy, Chrono Trigger, Vagrant Story y Dragon Quest.
¿Y qué forma hay de conseguir este objetivo? Pues sí, lanzando un videojuego para iOS y Android en formato free to play desarrollado por un equipo inglés, Mediatonic, los cuales cuentan con no pocos juegos para móviles, navegadores y redes sociales en su ya extenso currículum. Sin embargo, el toque propio de Square Enix sigue viniendo de Japón, siendo obra de Ryoma Ito en el caso del fabuloso apartado artístico y de Ryo Yamazaki en lo relacionado con una banda sonora capaz de recordarnos a la de alguna que otra gran joya de la firma nipona. Así surge Heavenstrike Rivals, juego que hoy analizamos.
¡Espera tu turno!
¿Aún seguís ahí? Lo digo porque, por norma, las palabras ‘free to play’ suelen generar estampidas en cierto grado injustificadas. Bien es cierto que hay que desconfiar de lo ‘gratis’ cuando entramos en la App Store o en la Play Store, dado que los micropagos suelen asomar su patita bajo la puerta con demasiado descaro, entrometiéndose en la jugabilidad en el caso de los videojuegos sin ningún tipo de vergüenza para favorecer al que más paga. En este caso, hay que decir que desde Mediatonic y Square Enix han sabido disimularlos bien, haciendo que pagar con dinero real sólo sea necesario para avanzar con mayor velocidad al permitirnos recargar en el acto una barra de energía (que luego explicaremos), por lo que, efectivamente, podemos afirmar que se puede jugar a Heavenstrike Rivals sin pagar un duro, aunque seguramente no al ritmo que nos gustaría.
Dicho esto, creemos que ya va siendo hora de hablar del juego en sí. Nos encontramos ante un título de estrategia por turnos con toques de RPG bastante completo y adictivo, aunque por supuesto no alcanza el nivel de profundidad de cualquier propuesta para consola o PC. Es por lo tanto, un buen entretenimiento para pasar la tarde o hacer tiempo siempre y cuando contemos con conexión a internet.
Su propuesta jugable viene aliñada con el toque de cualquier producción de Square Enix que se precie: una historia que nos sitúa en las tierras de Lunnain, un país flotante sumido en una cruenta guerra entre hombres (y derivados/amigos) contra los caídos, unos seres que no tienen otro interés en la vida más allá que destruir todo lo que ven. Por lo tanto nos tocará ponernos en la piel de un héroe y comandar nuestras tropas contra tan molestas criaturas.
Los combates se realizan, tal y como ya hemos comentado, por turnos y sobre un tablero. Bien es cierto que existen decenas de propuestas de este tipo tanto dentro como fuera de los videojuegos para móviles, pero el caso es que Heavenstrike destaca por ofrecer una jugabilidad medida, un muy buen ritmo de combate y, sobre todo, un amplísimo plantel de unidades que podremos situar sobre el tablero; cada una de ellas con sus propias habilidades, puntos fuertes y débiles, ofreciendo un nivel de profundidad difícil de alcanzar entre sus semejantes.
Llegar a controlar las más de 200 unidades existentes es toda una proeza, muestra de que hemos dedicado horas y horas al juego de Square Enix. Además, tal y como por otro lado también ocurre en la gran mayoría de juegos del estilo, dichas unidades van evolucionando según las usemos, ganando puntos de experiencia combate a combate.
Como decimos, cada una tendrá su rol dentro de la acción. Las hay de tipo explorador, muy rápidas en avanzar pero débiles y de poco poder ofensivo; al igual que las hay mágicas con un gran poder de ataque, centradas en el ataque a distancia o sanadoras. Cada una de ellas tiene un costo para poder ser desplegada en el tablero, por lo que habrá que tener muy en cuenta la ya citada barra de energía a la hora de plantear cada uno nuevo despliegue.
Más allá del modo para un solo jugador, encontramos en la posibilidad de disfrutar de combates contra otros jugadores el otro gran acierto de Heavenstrike Rivals, algo que sirve para alargar sobremanera su vida útil una vez hayamos exprimido la campaña en solitario, la cual por cierto no es precisamente corta, dado que ofrece decenas de combates de menor a mayor dificultad.
Por lo demás, ya hemos citado el gran trabajo de los artistas japoneses a la hora de ejecutar un apartado artístico y sonoro pocas veces visto en las producciones para móviles, con un diseño muy acertado de los menús, los personajes y los distintos efectos, y una banda sonora que merece ser escuchada con atención.
Esquivando fantasmas.
En conclusión, nos encontramos ante una de esas propuestas para móviles y tabletas que realmente merecen la pena pese a encontrarse dentro de la categoría de los free to play, pidiendo a gritos que por una vez nos dejemos de prejuicios (justificados o no) hacia este tipo de producciones.
Se nota el cariño puesto tanto por parte de la editora como de un estudio de desarrollo que quiere no defraudar, que ha cuidado su trabajo para que pueda estar a la altura de la firma a la cual representa. Heavenstrike Rivals ofrece una propuesta sólida, duradera y adictiva, capaz de sortear en cierto grado y de forma elegante el fantasma de los free to play, aunque no nos olvidemos que, si queremos avanzar de forma tan rápida como nos gustaría, seguramente nos toque pasar alguna que otra vez por caja.
Cierto es que tampoco inventa la rueda ni ofrece algo que no se pueda encontrar en otros tantos juegos del estilo, contando con menor profundidad de la que podemos encontrar en cualquier juego de estrategia por turnos de PC y consolas, portátiles incluidas. Pero lo dicho, teniendo en cuenta el tipo de mercado en el que se asienta, se trata de una propuesta a tener en cuenta.
Lo mejor:
- El plantel de unidades a controlar es realmente espectacular, siendo en ocasiones abrumador debido a las muchas posibilidades de combate.
- Ofrece un desarrollo sólido, dinámico y adictivo. Se nota la buena labor de diseño de sus responsables.
- Destaca el apartado artístico y sonoro, siendo capaces de poner sobre la mesa aquello que todos esperamos de una producción de Square Enix.
Lo peor:
- Pese a que esquiva el tema con cierta gracia, sigue siendo un free to play, y si queremos avanzar rápidamente toca pagar.
- ¡Ah, se nos olvidaba! Está completamente en inglés, pero siendo un juego de estrategia por turnos tampoco es un punto crucial.
- Si te vas al pueblo con él y no tienes cobertura, no podrás jugar. Requiere de conexión a internet.