Como era de esperar, la ESRB (junta de clasificación para software de entretenimiento) de Estados Unidos ha clasificado a The Witcher 3: Wild Hunt con la M de Maduro. No es algo precisamente nuevo, si tenemos en cuenta de que las anteriores entregas protagonizadas por Geralt de Rivia cuentan con sus buenas dosis de sexo y violencia.
Lo más curioso, o al menos lo que más interesa a los jugadores, son las razones de esta clasificación, que como es costumbre, la ESRB ha compartido.
“Se trata de un juego de rol de mundo abierto, donde el jugadores asume el rol de Geralt, un cazador de monstruos que busca a una mujer desaparecida” comienzan, para poco después dar paso a lo interesante. “[...] el combate está salpicado de gritos de agonía y sonidos de impacto. Grandes efectos de salpicaduras de sangre surgen cuando los enemigos son cortados, con algunos ataques resultando en decapitaciones o desmembramientos”.
Algunas escenas mostraran decapitaciones a cámara lenta y otras clases de gore, como una autopsia, una habitación llena de cadáveres colgando del techo, llenos de sangre o desnudos en bañeras.
Sobre el contenido sexual, el ESRB dice que “el personaje central puede tener actividad sexual con prostitutas y compañeras femeninas. Estas breves secuencias muestran pechos y traseros femeninos, mientras se escuchan gemidos sexuales, aunque la cámara corta antes de mostrar actos sexuales explícitos”.
Por supuesto, todo esto va acompañado de otros tantos contenidos, como insultos, borracheras, diálogos malsonantes, etc., que le han hecho ganarse esa clasificación de “sólo para adultos”.
Habrá que esperar hasta mediados de mayo, cuando The Witcher 3: Wild Hunt saldrá a la venta, para saber si los contenidos del juego de CD Projekt RED son tan explícitos como insinúa el ESRB. Wild Hunt estará disponible en PC, PlayStation 4 y Xbox One.