La saga Dragon Age se encuentra en su mejor momento tras el lanzamiento de su tercera entrega, Dragon Age Inquisition, una entrega que ha sabido solucionar los errores de la segunda, convenciendo a la mayoría de los fans. Por ello cuesta creer lo que David Gaider, guionista principal de la saga, ha comentado a EDGE.
Hablando sobre los orígenes de la franquicia, Gaider ha confesado que el equipo desarrolló Dragon Age Origins pensando en que no tendría secuelas. No por falta de ideas, sino porque creían que no tendría suficientes seguidores como para que la continuación fuera viable.
“En los comienzos, pensábamos que Dragon Age Origins iba a tener que vivir como un juego único. No era descabellado pensar que sería nuestro único disparo en la franquiciapensábamos que Dragon Age Origins iba a tener que vivir como un juego único.” ha comentado. “El epílogo existe porque inicialmente estábamos seguros de que no habría un segundo juego”.
El juego fue un éxito, lo que supuso una gran sorpresa para los creadores y trastocó parte de sus planes. “Últimamente he llegado a arrepentirme de cómo hicimos eso [el epílogo]. Porque los epílogos fueron puestos muy rápido y algunos de ellos se adentran tanto en el futuro [...] Estamos intentamos crear una trama [para las secuelas] y estamos intentando mirar atrás, pero hay cosas que fijamos tan en la distancia que ahora nos coartan. ¿Podemos respetarlas todas? [...] Es como, mierda Dave, ¿por qué escribiste eso?”.
Sea como sea, Gaider cree que el éxito de Dragon Age se debe al auge de la fantasía medieval en generales, y que ha ayudado al asentamientos de los juegos de rol de esta temática. ¿Estáis de acuerdo?
Dragon Age Inquisition salió a la venta hace varios meses, aunque desde Bioware todavía siguen trabajando en contenido para la campaña principal. De momento se desconoce cuándo estos DLCs verán la luz.