Metal Gear Solid V: The Phantom Pain aterrizó en las tiendas el pasado 1 de septiembre convirtiéndose casi por aclamación popular en el mejor videojuego de la serie y, por ello, en el mejor título de infiltración y sigilo de todos los tiempos.
Pero en fin, el caso es que la última obra de Hideo Kojima no ha escapado a la polémica debido a los problemas del creativo con su editora, Konami, con la cual supuestamente ha roto relaciones. Por lo visto la japonesa no quiere gastarse más millonadas en desarrollar superproducciones como esta, y un genio como Kojima tampoco quiere dejar de hacer lo que mejor sabe hacer; grandes juegos que requieren de grandes presupuestos.
Pero a lo que vamos, el caso es que según los análisis de la revista Forbes, Metal Gear Solid V: The Phantom Pain necesita mantener su ritmo de ventas para ser rentable. En concreto debe alcanzar los 5-6 millones de unidades distribuidas, algo que tampoco debería ser muy difícil teniendo en cuenta que en unas tres semanas ha superado los 3 millones. Pero claro, es sabido por todos que pasadas unas semanas la euforia por un juego suele desinflarse entre los posibles usuarios.
Según todas las estimaciones, MGSV: TPP habría costado unos 80 millones de dólares, una cifra habitual en producciones de este tipo; aunque que queda bastante lejos de lo que costaron juegos como Destiny y Grand Theft Auto V.