Durante los últimos tiempos algunos se han atrevido a decir que Shigeru Miyamoto está mayor, que el afamado creador de Super Mario, merecedor del Premio Príncipe de Asturias en 2012, se está quedando sin ideas y empieza a flojear. Sin embargo él no quiere oír hablar de retiro, de dejar atrás aquello que le apasiona, y lejos de amedrentarse ante sus casi 62 años, el que está considerado como uno de los padres del videojuego moderno sigue dando pero que mucha guerra.
Prueba de ello es su intención de ir un poquito más lejos de este ocio virtual como ha demostrado con la presentación en el marco del Festival de Cine Internacional de Tokio de su primera película, un film en 3D basado en la saga Pikmin y bautizado como Pikmin Short Movies.
Compuesto por tres historias llamadas The Night Juicer, Treasures in a Bottle y Occupational Hazards, se trata de tres cortos unidos por un mismo universo, aunque el creativo ha reconocido haber grabado un total de 20 cortos.
Evidentemente esto no significa que vaya a dejar su gran pasión por los juegos para centrarse en las películas de animación, sólo que como él mismo reconoce “los gráficos actuales de consolas son tan buenos que he empezado a sentir la necesidad de lidiar con ellos en algo así”.
“Hacer películas años atrás era algo que requería de habilidades muy distintas, pero ahora se sienten tremendamente parecido a hacer un videojuego”.