NX sigue siendo a día de hoy el mayor misterio de Nintendo. De este proyecto, que se deduce será su nueva consola de sobremesa, heredera de Wii U, no sabremos nada hasta 2016 como mínimo, tal y como sus creadores han repetido en varias ocasiones. ¿Pero a qué se debe este secretismo?
El presidente de la Gran N, Satoru Iwata, lo ha desvelado durante la última reunión de la compañía con sus accionistas. El motivo es, ni más ni menos, que quieren evitar que la competencia copie sus ideas.
“No podemos hablar sobre NX. Si lo hacemos, los competidores podrían tomar nuestras ideas y los consumidores no se sorprenderían” ha comentado. “Esto no sería beneficioso ni para la compañía ni para sus inversores”.
Por otro lado, Iwata ha explicado que el lanzamiento de la nueva consola no significaría el fin de las actuales. “NX es un nuevo hardware, y lo empezaremos de cero. Por otro lado, 3DS y Wii U son sólidas. Cortar inmediatamente el desarrollo de software para hardware previos por el lanzamiento de una nueva consola sería ineficiente [...] Seguiremos haciendo software para 3DS y Wii U mientras nos preparamos para NX. Estamos priorizando la satisfacción de nuestros clientes que compraron la Wii U”.
Tendremos que seguir esperando para conocer más noticias de Wii U, pero al menos los jugadores de sus actuales consolas pueden respirar tranquilos, ya que aún hay de ellas para rato.