Este fin de semana, la localidad riojana de Arnedillo acoge una de las tradiciones más curiosas de la región. Se trata de la “Procesión del Humo”, declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional en el año 2013.
Todos los años, el último domingo de noviembre, los vecinos de Arnedillo preparan desde bien temprano las hogueras junto al recorrido, por donde pasará la comitiva de la Procesión del Humo. Cada hoguera, tiene sus encargados de agitar, con ramas, el humo para crear una densa niebla.
La fiesta tiene su origen en 1888, cuando la localidad riojana de Arnedillo sufrió una trágica epidemia de viruela negra que causó una gran mortandad. Los habitantes de Arnedillo buscaron en la fé lo que la ciencia no les proporcionaba.
Pusieron una vela en cada uno de los 7 santos venerados en la localidad y la última en consumirse indicaría al santo que saldría en procesión. El elegido fue San Andrés, curiosamente “protector de la salud de los individuos”.
Se realizaron hogueras en las que se quemó romero y se le atizó con grojo en las calles y plazas de la localidad por su cualidad desinfectante, sacaron a San Andrés en Procesión y la epidemia remitió. Desde entonces todos los años se conmemora la “Procesión del Humo”.
El sábado 24 de noviembre por la tarde, la 'Cofradía de San Andrés' se encarga de trasladar la imagen desde la ermita donde pasa el resto del año, hasta la Iglesia.
El rito comienza a las 12:00 horas en la Iglesia de san Servando y san Germán. Es en ese momento cuando los cofrades que portan la imagen del santo comienzan la “Procesión del Humo” de Arnedillo por las estrechas y empinadas calles de la localidad.
Durante un rato la imagen del santo va recorriendo las calles y las hogueras junto a los vecinos del pueblo y a los curiosos visitantes que se han acercado hasta Arnedillo.