La primera reacción dentro del PSOE fue la de Elena Valenciano, seguida la del ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, que esta mañana en RNE ha vuelto a insistir en que un asunto tan grave no se despacha con el silencio y un comunicado a los medios, por lo que “no quiero pensar que pueda ser presidente del Gobierno y ante una situación difícil emitir un comunicado”.
Por otro lado, ha valorado la dimisión de Camps como un hecho “positivo”, todo lo contrario que el silencio del presidente nacional del PP que “por la mañana le decía que fuera al juzgado a admitir que era culpable y, por la tarde, decía en un comunicado que era presuntamente inocente”. Blanco ha añadido que “se trata de una dimisión dentro de un proceso judicial que implica gravemente al PP en relación con el caso Gürtel”.
También ha destacado que el ex presidente Camps “tiene derecho a su defensa”, la que “le negaba el PP” cuando le pedía que fuera juzgado y se declarara culpable.
Inocente o culpable
Dada la cronología de la dimisión de Camps en las últimas 24 horas, el portavoz del Gobierno instaba ya el miércoles por la tarde a que el líder del PP comunicara si considera al ex presidente Francisco Camps inocente o culpable, puesto que la primera estrategia consistía en declararse culpable, pagar la multa y seguir adelante con su Gobierno, pero a última hora de la mañana la presión pudo con él y dejó en la estacada a Costa y Campos.
En todo caso, Rajoy apostaba por defender la culpabilidad y que agachara la cabeza. Pero, por la tarde en su comunicado optó por la contrario: la inocencia engalanada con una dimisión por el bien de su partido. De ahí que Blanco atacara a Rajoy por ese cambio de postura en el que tuvo que ver la presión ejercida también por Federico Trillo, que ha ejercido de salvaguarda del político valenciano hasta el último momento junto a su íntima amiga y compañera de filas, Rita Barberá.