No es el único delito del ex mandatario israelí, porque no sólo ha sido condenado por esta violación sino también por acosar y amenazar sexualmente a otras dos mujeres en los años que duró su mandato como presidente entre 2000 y 2007.
En Israel, los delitos de violación están condenados con penas que van de los cuatro a los dieciséis años. En el caso de Katsav cumplirá siete año a pesar de haber negado los cargos durante el proceso.
Sin embargo los tres jueces ante los que declaró consideran que sus testimonios estaban “plagados de mentiras”. También se le ha acusado de intentar obstruir la vía judicial para evitar que uno de los testigos contara su relato.
El actual primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha declarado que aunque lo sucedido es triste para todo el país, el veredicto demuestra que “todos son iguales ante la ley”.